Más de un centenar de melillenses, como viene siendo habitual cada año, se reunieron en la Mezquita del Toreo con el fin de pasar una tarde en compañía de los diestros Juan José Padilla, Cayetano Rivera y Saúl Jiménez Fortes. En esta ocasión, la mayoría de personas se dio cita para despedirse del torero Juan José Padilla.
La estrella de la tarde
A pesar de las altas temperaturas, los visitantes no dudaron en acudir vistiendo sus mejores galas. La mayoría de los asistentes portaba neveras llenas de agua y bebidas varias y bolsas cargadas con bocadillos y otro tipo de aperitivos para amenizar la jornada. Entre los asistentes se encuentra Juanma, quien asegura que lleva acudiendo a las corridas de toros de nuestra ciudad desde que era pequeño. “Me ha gustado siempre muchísimo. Además, es la fiesta nacional, es lo que tenemos que defender todos los españoles”, resaltó. En este caso, como en muchos otros, acudió especialmente por Padilla, a quien tildó de ‘showman’, por su forma de lidiar con el toro: “Yo soy cantante y a lo mejor no entiendo mucho, pero veo que Padilla hace espectáculo”, comentó. También Manoli, otra visitante, aseguró que acudió a la plaza por Padilla, pues considera que “es todo un espectáculo de diestro”.
Decenas de animalistas se concentran en contra de la tauromaquia
Decenas de anti-taurinos se concentraron ayer en los alrededores de la plaza de Toros para protestar en contra de la corrida de toros que, en ese mismo momento, estaba teniendo lugar. Maria José Ruiz es miembro de la plataforma Melilla Anti-taurina y aseguró que se trata del cuarto año en el que convocan a la población a manifestarse en contra de las corridas de toros. “Este año ha habido mucha gente joven que, a través de las redes, nos confirmaron su asistencia. Lo que me llena de orgullo es que las nuevas generaciones no quieren esto”, dijo Ruiz. Emilio, participante en la concentración, comentó a El Faro que la intención de la protesta es evitar esta práctica con el dinero público. “Estoy totalmente a favor de la mal llamada ‘fiesta nacional’. Además, la tauromaquia tiene los días contados: cada vez hay más gente y eso se ve reflejado en que cada vez hay más policías en las concentraciones”, sentenció. Abdu, otro asistente de 19 años piensa de la misma forma: “Yo el arte ahí no lo veo en ningún sitio. Eso es matar a un animal, torturarlo y luego”.