Marín desvela algunas de las 83 deficiencias de la obra del Hospital Universitario

Hasta ahora sabíamos que los técnicos de la Ciudad Autónoma habían encontrado 83 deficiencias en la obra del Hospital Universitario, pero no cuáles eran estas. Pues bien, este lunes el consejero de Fomento, Miguel Marín, ha desvelado algunas de ellas.

Así, el consejero ha insistido en que no se puede aprobar el proyecto modificado ni la licencia de primera ocupación porque, en primer lugar, las personas con discapacidad no pueden entrar en el recinto, ya que, según la normativa vigente y tal como ratifican los técnicos, hay que colocar dos ascensores para hacer accesible el paso para ellos.

Siguiendo con este colectivo, según Marín, tampoco están preparados los aseos para discapacitados. Por lo tanto, como están “mal hechos”, deben rehacerse, ha indicado.

Y luego está, en palabras del consejero, “lo que resulta aún más peligroso”: enchufes pegados a las duchas que ponen en riesgo tanto a los pacientes como al personal sanitario.

“Estas son algunas de tantas deficiencias que existen en la obra del Hospital Universitario”, ha subrayado Marín, quien ha reiterado que, cuando esté todo conforme según la normativa y los técnicos de la Ciudad den su aprobación, tardará “menos de un minuto” en firmar tanto el proyecto modificado como la licencia de primera ocupación para poder comenzar con el uso de las instalaciones.

Tras remarcar que la Ciudad Autónoma está haciendo “bien” su parte del trabajo y que la intención del Gobierno local es colaborar en todo lo posible con los técnicos que están ejecutando la obra para que esta acabe lo antes posible, el consejero ha informado de que, en una videollamada, el pasado día 21 de enero, entre los técnicos de la Consejería y los que están llevando a cabo la obra por parte del Ministerio de Sanidad y el Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (Ingesa) en Madrid, éstos últimos “reconocieron que existen esas deficiencias y acordaron que tienen que venir a Melilla a ver in situ cuáles son y arreglarlas lo antes posible” para poder aprobar, primero, el proyecto modificado y, después, conceder la licencia de primera ocupación.

La "incompetencia" de Moh

Marín no se ha ahorrado críticas hacia la delegada del Gobierno, Sabrina Moh, quien, según él, tendría que haber exigido que esos técnicos estuvieran aquí desde hace más de tres meses supervisando la obra junto a los técnicos de la Ciudad para comprobar su evolución y que las obras se hacen de acuerdo con la normativa urbanística vigente.

En este sentido, el consejero ha rechazado “rotundamente” las críticas vertidas contra la Consejería por no conceder la licencia de primera ocupación por parte del diversos miembros del PSOE y de la delegada del Gobierno. “Son todo mentiras y difamaciones e indirectamente están acusando a los técnicos de la Ciudad de no querer otorgar la licencia cuando es todo lo contrario, ya que están poniendo todo cuanto está en su mano”, ha insistido.

Así, hay en estos momentos en el proyecto dos arquitectos y un arquitecto técnico como prueba, ha resaltado Marín, de que están empleando todos los recursos disponibles para que todo se lleve a cabo lo antes posible. Sin embargo, ha añadido que los técnicos de la Ciudad ya han hecho su trabajo y que Moh debe preocuparse por la parte que le corresponde a ella. “Eso es lo que debió hacer hace muchos meses y ha estado pendiente de otras cosas”, ha criticado el consejero, quien ha pedido a Moh “que no culpe de su incompetencia, negligencia e ineptitud a los demás y se mire a ella misma, porque es la única responsable”.

Marín ha cargado contra “la frivolidad con la que la delegada del Gobierno habla de la obra del Hospital, porque está exigiendo que se dé una licencia de primera ocupación a un hospital que no está preparado para que vayan enfermos a ser tratados ni para que el personal sanitario pueda trabajar en condiciones óptimas”. El consejero cree que Moh “piensa que se está dando una licencia de primera ocupación a un almacén de ladrillo o de cemento y ahí demuestra una incompetencia manifiesta, total y absoluta”.

El retraso, culpa de la delegada

Además, Marín ha subrayado que el retraso de la obra se debe “exclusivamente” a la delegada del Gobierno, porque, pese a que ya hace tiempo que anunció que en 2023 iba a estar inaugurado el Hospital Universitario, durante dos años “no se ha preocupado de estar encima de que la obra se ejecutase en tiempo y forma y en función de la normativa existente”. Muy al contrario, para el consejero, Moh “ha estado preocupada exclusivamente en hacerse fotos y salir en los medios de comunicación anunciando a bombo y platillo esa inauguración que nunca llega”.

En su opinión, como el retraso es sólo culpa de la delegada del Gobierno, ésta se defiende “difamando y mintiendo para tapar su incompetencia, su negligencia y su falta de diligencia en el ámbito de sus competencias” y culpa a los demás de “esa incompetencia, negligencia e ineptitud”.

Marín ha rebatido una vez más que el retraso de la obra se deba a que no se le quiera dar la licencia de primera ocupación, ya que, para ello, debe haber un proyecto aprobado y lo que hay actualmente son cuatro modificados, el último de ellos sin proyecto. “Han presentado una serie de planos que no coinciden con la obra que se ha adjudicado realmente. Por tanto, hasta que no se modifiquen esos planos y parte de la obra que se ha llevado a cabo, que va contra la normativa, ese proyecto modificado no se puede aprobar. Y, si no se aprueba el proyecto modificado, es imposible dar una licencia de primera ocupación”, ha explicado para terminar.