La Sociedad Melillense de Educación Matemática organizó ayer una olimpiada para los alumnos de quinto y sexto de Primaria. Más de 70 estudiantes disfrutaron de ‘las mates’.
‘Si por seis peras me dan una trucha y un pan, y por cada cuatro panes me dan tres peras. ¿Cuántos panes me darán por una trucha?’. Éste es el primer problemas que los alumnos quinto y sexto de Primaria tenían que resolver. Uno de los quince que formaba parte de la prueba individual que les mantuvo sentados frente a unos folios haciendo cálculos durante una hora y media. Con la cabeza sostenida con la mano y frunciendo el ceño daban vueltas y vueltas a sus ideas. Calculadora en mano intentaban resolver los cabos sueltos de los problemas que más les estaba costando resolver. Con este tipo de preguntas no sólo se ve la rapidez mental de los chicos y su domino de las matemáticas más sencillas, sino también su capacidad para pensar en soluciones que van más allá de una suma o una multiplicación. Un total de 70 valientes de todos los centros educativos de Melilla se enfrentaron a estos ‘problemas’ que ayer llegaron a rodearlos, pues las pruebas con las matemáticas continuaron con los talleres en grupo.
José Ramón Cortiñas, profesor del colegio Mediterráneo y coordinador de las Olimpiadas Matemáticas de Primaria, indicó que en esta sexta edición los alumnos iban a aprender cómo multiplicaban los rusos, los mayas, los árabes y los egipcios. Ésta era una de las actividades que desarrollaron en grupos de siete alumnos.
Estos niños de Primaria también crearon una calculadora de papel, que aunque parezca raro hace las cuentas como una de pilas, y descubrieron cómo se suma o multiplica en braille.
El objetivo de esta actividad organizada por la Sociedad Melillense de Educación Matemática es que los alumnos se den cuenta de que ‘las mates’ están alrededor de todo en sus vidas. La intención de esta olimpiada es que estos estudiantes vean que hay mucho más que sumas, restas, divisiones o ecuaciones, es decir, que las matemáticas se pueden aplicar a muchos aspectos de la vida cotidiana.
Cortiñas indicó que cuando los profesores revisan las pruebas individuales observan que algunos alumnos destacan del resto. Los chicos tienen que señalar en la prueba individual la respuesta a los problemas como si fuera un examen tipo test, aunque se les pide alguna explicación para saber por qué eligen ese y no otro resultado. Su manera de razonar la soluciones e incluso de justificar que las otras opciones no son válidas son las pistas que avisan a los docentes de que ese alumno puede ser brillante en matemáticas.
No obstante, Cortiñas resaltó que la principal meta que se persigue con la Olimpiada Matemática es que los niños se diviertan haciendo ejercicios que ‘camuflan’ restas, divisiones y ecuaciones matemáticas.
El coordinador de esta actividad explicó que el próximo año se elegirá entre el Enrique Nieto y el Real para acoger esta actividad. Cada dos años se organiza en un centro diferente, apuntó, donde no sólo realizan las actividades y talleres de matemáticas, sino que estos alumnos participan en una convivencia con otros escolares de su edad.
Será dentro de un mes cuando se dará a conocer a los seis ganadores de esta edición de la olimpiada de Primaria. La entrega de trofeos y regalos se realizará en un acto abierto para todas las familias. Además, aprovecharán este evento para entregar también a los ganadores de la Olimpiada Matemática de Secundaria sus premios. Cortiñas informó que los alumnos de la ESO que queden en el primer y el segundo puesto viajarán a Andorra para participar allí en el certamen nacional.