Las tiendas y mercados de Melilla han amanecido esta mañana abarrotados de personas en el inicio del Ramadán 2023-1444, el mes sagrado de la comunidad musulmana.
El Faro se trasladó hasta el Mercado Central y a las calles de la ciudad, para ver de primera mano como fue el inicio de esta festividad, y a pesar de la difícil situación económica que atraviesa la ciudadanía melillense, los mercados y tiendas de Melilla amanecieron abarrotados de personas ansiosas e ilusionadas por comprar los mejores alimentos para poder hacer frente al mes "tan sacrificado pero tan maravilloso" que les espera por delante a todos los musulmanes.
"Hemos empezado con un arranque muy acelerado porque es el primer día y la gente tiene que tener una reserva en su casa", confiesa Ismael, uno de los comerciantes del Mercado Central.
A pesar de este gran inicio y respuesta por parte de la ciudadanía, no se mostraba tan confiante con los próximos días debido a la alta inflación que han sufrido la gran mayoría de productos. "Creo que no van a comprar tanto como el año pasado porque está todo muy caro, los cartones de huevo han subido el doble por ejemplo, pero tenemos que confiar en que la gente compre hasta el final del Ramadán", resalta.
Por su parte, el comerciante Mohamed muestra su alegría por la gran cantidad de personas que han venido a comprar a su tienda durante toda la mañana. "Ha venido mucho gente a comprar como todos los años porque están felices por el inicio del Ramadán", dice el comerciante que a diferencia de Ismael, éste se muestra muy ilusionado por la venta que se avecina durante todo el mes.
En la misma línea se encuentra su compañero de profesión, Tito, que a pesar de la complicada economía que existe actualmente no se sorprendió del gran ambiente que presenciaba el Mercado Central en la mañana de ayer. "Estábamos deseando de que empezara ya el Ramadán porque es un mes de venta buenísimo y en especial en los primeros días porque se compra bastante y todo se vende muy bien". "Es una verdadera alegría ver todo esto lleno de melillenses", recalca el chico.
Asimismo, El Faro también ha querido consultar a los comerciantes y clientes que se encontraban comprando cuáles han sido los productos más demandados en este primer día y el abanico es muy amplio.
Ismael explica que los productos que más se lleva la gente en el primer día del Ramadán son los dátiles, la harira, huevos, pescado, carne, y sobre todos las especias para dar un sabor distinto a la comida, todos estos productos "son fundamentales" porque se comen todas las noches prácticamente durante este mes.
Siendo consultado un poco más sobre las especias, el comerciante asegura que las tres especias más demandadas por los ciudadanos son las morunas, el curry o la cúrcuma. "Los musulmanes son muy fieles de las especias y en el Ramadán se nota una barbaridad", recalca el hombre.
El frutero Mohamed, que asegura que el precio de los productos no está muy alto porque han bajado un poco en este primer día de Ramadán, dice que "todo se está vendiendo muy bien". "Los tomates, el perejil, las cebollas, el cilantro, los apios, toda la verdura y fruta gira en torno a un euro el kilo y se está vendiendo genial. Los musulmanes teníamos muchísimas ganas de que llegase al fin este día y se está notando mucho en la venta", insiste.
Su compañero de profesión Tito, no destaca algo en especial porque asegura que en el Ramadán "la gente compra de todo a lo grande como ocurre todos los años". Por ello, aunque resalta algunos productos como la harira, la shebakiya o los dátiles, "los musulmanes vienen a por la mayor cantidad de productos posibles para que no les falte de nada y eso es buenísimo para todos los negocios pequeños como el nuestro", subraya el joven.
La situación económica de Melilla no se encuentra en sus mejores momentos, eso es una realidad, y a pesar de que todos los musulmanes consultados afirman que intentan dosificar las compras para intentar no gastar mucho dinero de golpe, también aseguran que en el Ramadán todo es distinto y no pueden escatimar en comida durante este mes tan sagrado para ellos.
"Todas las cosas está muy caras, cada vez más, pero vamos a Marruecos si hace falta porque tenemos que estar bien alimentados durante este mes y tenemos que disfrutar lo máximo posible", comenta Fatima, que además cuenta que en su familia han comprado prácticamente igual que el año pasado aunque la economía esté bastante peor.
El Faro pudo entrevistar a muchas de las personas que se encontraban por las calles del mercado con los carritos de la compra llenos y sonriendo por la "enorme felicidad" que le suponía el inicio del Ramadán. "Llevo toda la mañana en la calle comprando cosas para el primer día porque es un mes de celebración para todos los musulmanes", dice Naima, que además cuenta que ha comprado patatas, perejil, apios, shebakiyas, dátiles, aceitunas, verduras y que cada día vendrá a comprar más cosas.
Por su parte, la presidenta de la plataforma 'El Techo es un Derecho', Farida cuenta a El Faro como ha subido el precio de todos los productos de la cesta de la compra en Melilla y es algo que se va a notar bastante en el Ramadán, aunque los musulmanes vayan a hacer un esfuerzo aún más grandes para mantener las neveras llenas durante este mes.
"Está todo carísimo y no lo entiendo porque en Málaga está todo mucho más barato", cuenta la presidenta que además cuenta como vienen una gran cantidad de personas a su asociación para pedir comida, en especial huevos, leche, fruta y verduras. "Es una pena ver como las familias vienen muertas de hambre a pedirme comida y ahora durante este mes todo va a ir más seguro", sentencia.
De esta forma, tras ver la gran cantidad de productos que compraron los melillenses, El Faro también ha querido saber cuáles son los productos que prefieren tomar los melillenses para romper el ayuno.
"A mí me gusta de todo para romper el ayuno, en especial la harira con gambas porque con carne no me gusta", cuenta Fatima entre risas.
"Yo soy muy feliz con mi taza de harira y mis dátiles porque tienen muchísimas vitamina y es algo que nos ayuda mucho a mantenernos enteros y dispuestos para afrontar el día, sin duda me quedo con eso", dice Farida que además explica que "un Ramadán sin dátiles es como una Navidad sin polvorones, no hay más".
El melillense Iman Malik, cuenta a El Faro que a él personalmente le gusta seguir el ejemplo del profeta Muhammad. Por ello, decide romper el ayuno con dátiles y agua, luego realizar la oración del ocaso y posteriormente comer algo ligero como una sopa o harira con dátiles. "Las comidas copiosas en Ramadan para romper el ayuno son dañinas tanto para el cuerpo como para el espíritu", asegura Malik.
Por otro lado, la gran mayoría de nosotros sabemos que el Ramadán es una fecha clave para la comunidad islámica, pero aún así, hemos querido ir un poco más allá y saber de primera mano que significa esta celebración para los musulmanes.
“Para mí el Ramadán lo es todo, si no haces el Ramadán, no eres un verdadero musulmán, tengo muchas ganas de que llegue porque es algo muy especial para todos nosotros”, confiesa Al-Lal. En la misma línea que Yamila, que lo tiene muy claro al respecto. “El Ramadán lo es todo para nosotros, desde que tengo uso de razón en mi familia siempre lo hemos celebrado y cada día era una fiesta para todos”, dice la mujer que además comenta que se preparaban mesas de comidas muy humildes, en armonía y con mucha alegría.
Por su parte, Mustafa explica más detalladamente cuál es la verdadera esencia del Ramadán. “Normalmente los musulmanes en el Ramadán tenemos que regalar y donar cosas a los vecinos, que ellos te inviten a ti, esa es verdadera esencia de todo esto, aunque debería ser así durante todo el año”, afirma Mustafa.
Por último, los musulmanes llaman al rezo cinco veces diarias, por lo que El Faro les ha consultado sobre si prefieren reza en casa o hacerlo en la Mezquita. En el caso de Mustafa, no tiene preferencia por ninguna de las dos opciones, ya que depende del momento y del lugar. “Depende del momento, hay veces que voy a la Mezquita y otras que me quedo en casa”, comenta el hombre, que además resalta que lo ideal es acudir a la Mezquita a rezar tras la ruptura del ayuno”.
Asimismo, Yamila explica qué hace una mujer en el Ramadán, en cuanto al rezo se refiere. “Los hombres acuden a la Mezquita a rezar mientras que las mujeres rezamos desde casa, pero si es verdad que una vez se rompe el ayuno, tanto hombres como mujeres podemos ir a la Mezquita a rezar”, subraya la melillense. Asimismo, la fiesta del Ramadán siempre finaliza con un rezo colectivo de todos los musulmanes que han formado parte de esta celebración.
Durante el año anterior, miles de musulmanes de Melilla se dieron cita para participar en el rezo colectivo que se realiza cada año en la explanada de La Legión para celebrar el final del Ramadán. Muchos explicaron a El Faro la emoción que sintieron, ya que desde hace dos años no se había podido realizar este acto por la pandemia del coronavirus.
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