Los expertos descartan el riesgo por amianto en el ambulatorio de Polavieja

Desmienten la información difundida por el Melilla Hoy y afirma que los niveles de amianto están “por debajo del límite”

El estudio encargado por el Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (Ingesa) para analizar los niveles de amianto en el centro de salud de la calle General Polavieja de Melilla ha descartado que exista riesgo por la presencia de agentes cancerígenos. El Instituto informó ayer que el análisis, realizado por el laboratorio Himalaya, especialista en este campo, indica que en el caso específico del amianto se han registrado “niveles por debajo del límite de detección de los muestreadores utilizados”. El Melilla Hoy difundió el pasado 9 de abril una información sobre la presunta vinculación de esa sustancia con trece casos de cáncer en trabajadores de este centro de salud, “la mayoría con resultado de muerte”. El citado diario habla de presencia del amianto en el techo y las cubiertas de este edificio.  Esta noticia provocó una gran alarma, no sólo entre los trabajadores de dicho ambulatorio, sino también entre los usuarios del centro.
Tras la publicación en este diario local de dicha información, los sindicatos solicitaron al Ingesa que se estudiara si realmente había partículas de amianto en el centro de salud y su relación con los casos de cáncer de algunos empleados.

Los hechos
El Melilla Hoy difundió hace un mes la denuncia de un ciudadano cuya hermana trabajaba en este ambulatorio y falleció a causa de un cáncer. Ese periódico publicó que la familia de esta empleada del centro de salud de Polavieja había presentado una denuncia en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 5 para comprobar si esa enfermedad estaba relacionada con el amianto que recubre el techo del ambulatorio. Asimismo, el diario informó de que había más casos de cáncer entre los trabajadores del centro de salud (hasta trece) e incluso entre ciudadanos que viven cerca de este edificio.
Tras esa noticia, que alarmó a trabajadores y enfermos que acuden a este ambulatorio, el Ingesa encargó un estudio, a petición de los empleados y sindicatos de sanidad, acerca de la seguridad ambiental en este centro y respecto a la presencia de amianto u otros elementos nocivos para la salud en el edificio.
No obstante, el Instituto recordó ayer,  en una nota de prensa, que el mismo día que salió publicada la noticia en el Melilla Hoy se envió un mensaje de tranquilidad a la plantilla y a las personas que utilizan estos servicios sanitarios, puesto que no se podía establecer que los casos de cáncer estuvieran relacionados con el amianto.
Además, el Ingesa destaca que mientras que se ha procedido al análisis por esta empresa especializada, los profesionales del área de Riesgos Laborales y Prevención  estudiaron la situación del centro y mantuvieron reuniones con los sanitarios y los sindicatos para informarles de todos estos procedimientos.

El resultado
“De acuerdo a los parámetros evaluados se puede concluir que no se identifica ninguna situación de exposición que supere los límites establecidos en los lugares de trabajo, según los reales decretos vigentes en la actualidad”, aclaró ayer el Ingesa una vez que se ha finalizado con el estudio de partículas de amianto u otras sustancias cancerígenas en el ambulatorio.
El Instituto apunta que los controles que se han realizado son “el análisis ambiental y de concentración en aire de fibras de amianto, análisis de patógenos ambientales, así como los niveles de exposición a productos químicos cancerígenos, radiaciones ionizantes y radiaciones electromagnéticas”.
También asegura el Ingesa que la información sobre el ambulatorio se va a poner a disposición de especialistas en epidemiología de la Comunidad de Madrid, que “van a colaborar en un estudio sobre la relación causa-efecto de cánceres que se han detectado en centro de salud”.
Por otro lado, el Instituto señala que el centro de salud de Polavieja va a sufrir una reforma integral. Están previstas unas obras que mejoren las instalaciones. Dicha modernización “servirá para que se preste la atención sanitaria adecuada a los melillenses”, añade.

La alarma social
Una vez publicada la denuncia en el Melilla Hoy de la presunta relación entre los casos de cáncer y el amianto en el centro de salud de Polavieja, UGT convocó una concentración el 22 de abril en las puertas del 061, servicio que está detrás del ambulatorio y que comparte el mismo edificio, aunque finalmente esta protesta se retrasó unos días. El sindicato denunció  que los trabajadores “continuaban expuestos al amianto”. Exigía al Ingesa que convocara al Comité de Salud laboral, puesto que el 30 de marzo ya había solicitado esta convocatoria para abordar este problema. El día 28 de abril, UGT llevo a cabo su protesta en las puertas del 061 y reivindicó mejoras en las condiciones de trabajo de los sanitarios. En cuanto a su denuncia sobre el amianto, sólo indicó que esperaba conocer los resultados del estudio que se iba a llevar a cabo por parte del Ingesa.
CCOO también pidió, a través de un escrito al Ingesa, que llevar a cabo un estudio. Asimismo, SATSE presentó un escrito ante la Inspección de Trabajo para que instara a la Administración a investigar el caso.