El profesorado del Instituto de Educación Secundaria Virgen de la Victoria se ha concentrado esta mañana en un acto de protesta contra lo que consideran un "linchamiento" que están sufriendo en los últimos días, tanto en medios de comunicación como en redes sociales.
A este acto acudieron los sindicatos educativos de nuestra ciudad, desde la Federación de Educación de Comisiones Obreras, hasta SATE-STEs, ANPE o CSIF.
La concentración consistió en una protesta de cinco minutos de silencio a las puertas del centro, donde tanto profesores como representantes de los sindicatos portaban pancartas donde se podía leer frases como "No a la violencia escolar", "No al linchamiento mediático" o "No a los bulos y mentiras".
El acto concluyó con un aplauso, tanto de los manifestantes como de alumnos allí presentes.
En posteriores declaraciones a los medios, el presidente de la Federación de Asociaciones de Madres y Padres (Fampa) en Melilla, Joan Casares, quien también acudió a esta concentración para mostrar su apoyo a los docentes.
Casares entendía que los padres de alumnos estuviesen preocupados por el incidente así como por las quejas relativas al castigo a los agresores por "insuficiente", del que dijo que podían llegar a estar de acuerdo.
Asimismo, lamentó las acusaciones vertidas en redes sociales en fechas recientes e instó a "dar la cara" a quien tuviera algo que decir.
Casares insistió en que el profesorado esta para garantizar la protección de los alumnos y ellos cumplen con su trabajo.
"Las normas y penas existentes no dependen de los centros sino del Ministerio de Educación y Formación Profesional y de la Dirección Provincial".
Por otro lado, el presidente de Fampa demandó una mayor concienciación sobre el bullying, del cual dijo, lleva a 80 niños al suicidio cada año en España.
"Este es un problema grave que hay que atender, pero se debe realizar un trabajo coordinado con el centro y el profesorado".
Además, recordó que en los institutos no suele haber asociaciones de madres y padres, por lo que apeló a los progenitores de alumnos a colaborar con los centros para tratar de cambiar las normas.
El pasado día 13, un alumno del Virgen de la Victoria sufrió una agresión por parte de tres alumnos, además de un cuarto joven ajeno al centro, en el horario del recreo. La Dirección Provincial expulsó a estos tres estudiantes y dictaminó que sería la Inspección Educativa la que tomase las medidas pertinentes, una vez se estudiase el caso.
Distintos sindicatos también han intervenido en este caso, condenando la agresión, aunque defendiendo a los docentes del centro de los ataques que, según han considerado, se vienen produciendo en las últimas jornadas. Tanto SATE-STEs como CCOO, aseguraron que el centro ha tomado las medidas disciplinarias oportunas y que apuesta por la resolución pacífica de los conflictos.
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