Desde que, dos años atrás, cambiasen las reglas del juego y se estableciese que no existen unas fechas concretas para las conocidas como rebajas de verano, los comerciantes observan como, año tras año, las tendencias cambian, y no dejan de sorprenderse de los nuevos hábitos de consumo de los clientes. En general, los comerciantes coinciden en que las cifras de venta de este año son ligeramente más positivas que el verano pasado, mientras que el menos optimista asegura que al menos no han ido a peor. Otra tendencia que apuntan varios trabajadores de las tiendas del centro es que los primeros días, al contrario de lo que ocurría años atrás, han sido los más flojos en cuanto a las ventas, mientras que según avanzaban los días, la clientela parece ir en aumento. Así lo aseguró a El Faro de Melilla Carmen Borrego, una de las encargadas de Duty Free. “Estamos viviendo unos días muy intensos”, aseguró la trabajadora, que ha notado “más ambiente” conforme han ido avanzado las jornadas con descuentos. Asimismo, asegura que “los primeros días fueron muy flojillos”, mientras que ahora los clientes acuden incluso a mediodía. Por otra parte, Borrego puso de manifiesto que han aumentado las rebajas y ahora cuentan con más ofertas en bolsos y relojes, que llegan hasta el 70%. “Como hace dos años” Por otra parte, Fátima, dependienta en una zapatería del centro de la ciudad, comenta que le ha sorprendido que las ventas están alcanzando niveles parecidos a los de “hace dos años”, mientras que asegura que la afluencia de gente al negocio ha aumentado considerablemente con respecto al verano de 2014. Por su parte, Mery Aselraf, encargada de una tienda de deportes, considera que el empujón a sus ventas ha llegado “a mitad de las rebajas”, por lo que apuesta por “mantener los descuentos”. Asimismo, Eva Heredia, dependienta de un negocio dedicado a las prendas íntimas y bañadores, asegura que en su tienda, empezaron con un alto nivel de afluencia. “El primer día fue muy fuerte y nos hemos mantenido”, sentencia la trabajadora. Artículos veraniegos A pesar de que en las rebajas de verano muchos aprovechan para renovar su fondo de armario tirando de artículos que han quedado descatalogados de cara a la nueva temporada, los comerciantes de la ciudad coinciden en asegurar que lo que más venden son artículos estivales. Así pues, bañadores, bikinis, pantalones cortos y camisetas para hacer deporte, son algunos de los productos más demandados por la clientela. Así lo aseguró a El Faro de Melilla la encargada de una tienda deportiva, que apunta que las camisetas y las chanclas para ir a la playa o a la piscina son dos de los productos que más demandan en su negocio. Por otra parte, Eva Heredia señala que los bañadores son uno de los productos estrella de la tienda en la que trabaja, y que tanto para hombre como para mujeres los piden por igual.
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