Cruz Roja Melilla celebró ayer la clausura de los cursos ofrecidos a cuidadores no profesionales reconocidos por el Inserso. Decenas de alumnos asistieron al acto de entrega de diplomas en la sede de la institución. La directora de formación de Cruz Roja, Toñi San José, afirmó que este tipo de actuaciones se realizan desde el año 2010 para que estos cuidadores “sean capaces de cuidar mejor a sus familiares”.
Algunas de las temáticas que se han impartido han sido Seguridad en la red, Hábitos Saludables, Técnicas de relajación o Prevención de accidentes domésticos.
Un total de 103 personas han asistido a estos cursos y talleres impartidos por técnicos y hasta un total de 24 voluntarios y voluntarias de la Institución con el objetivo de dotar a los mayores de las herramientas necesarias para el autocuidado y el ocio. Según apuntó San José, estos talleres han tenido una duración de 15 horas debido al “escaso tiempo de los cuidadores que no pueden estar mucho tiempo fuera de sus hogares”. Durante cinco semanas, han asistido un día a la semana.
La dinámica de los cursos es “escuchar al cuidador, ver cuáles son sus problemas y enfocar el curso a sus necesidades”, manifestó la directora de formación. “Ellos mismos son muy diversos y las personas a los que cuidan tienen distintas discapacidades”, añadió.