López Almendáriz: “En mi ánimo está que no tenga que intervenir Imbroda”

En opinión de la presidenta de la Confeme, el acuerdo sobre el reparto de la bonificación a las cuotas patronales “es una batalla directa” entre agentes sociales y económicos.

Este próximo viernes vuelven a reunirse patronal y sindicatos para tratar de alcanzar un acuerdo en el reparto de la bonificación a las cuotas patronales, que desde el pasado día 1 de enero afecta a más sectores y además ha supuesto un incremento de su cuantía respecto a las que se aprobaron en 2004, de tal forma que este año será del 43%, en 2013 del 46% y en 2014 del 50%.
En los dos encuentros anteriores no hubo acuerdo ante las posturas tan dispares de una y otra parte, aspecto que planteó la posibilidad de una posible intervención de la Ciudad, para que mediara en el asunto.
Sobre este aspecto, la presidenta de la Confederación de Empresarios de Melilla, Margarita López Almendáriz, fue ayer muy tajante, y en declaraciones a El Faro aseguró que en su ánimo estaba “que no tenga que intervenir el presidente de la Ciudad”. Según explicó, “lo mejor sería que llegásemos a un acuerdo los agentes económicos y sociales, porque esto es una batalla directa nuestra”.
La oferta de mediación de la Ciudad Autónoma fue anunciada hace unas semanas por el portavoz del Gobierno, Daniel Conesa, quien en rueda de prensa respondió a pregunta de los periodistas que desde el Ejecutivo estaban dispuestos a colaborar en lo que fuera necesario.
En esta misma línea se pronunció también el presidente de la Ciudad, Juan José Imbroda, que dijo estar predispuesto a mediar entre empresarios y sindicatos para alcanzar un acuerdo en el reparto de la bonificación.
Por su parte, los sindicatos parecen en este punto estar de acuerdo con la patronal y aunque en un primer momento el secretario general de UGT, Alonso Díaz, sí se mostró a favor de una intervención de la Ciudad Autónoma tras el fracaso de la primera reunión, al término de la segunda dijo que el acuerdo debía alcanzarse sin la necesidad de esta mediación.
Hasta ahora se han celebrado dos reuniones; una primera donde la Confederación de Empresarios proponía que los trabajadores no se beneficiaran de estas ayudas hasta 2014, alegando que la situación económica actual no tenía nada que ver con la de 2004 –cuando se conceden por primera vez estas ayudas–.
Esta postura fue rechazada tajantemente por los sindicatos, pues según plantearon “vulnera claramente los motivos por los que fue implantada en su día esta bonificación”.
Cabe recordar que la bonificación a las cuotas patronales fue un logro conjunto de Melilla y Ceuta, que en 2004 consiguieron que el Gobierno de España aprobara una Orden Ministerial que dictaminaba la aplicación de esas ayudas, con una cuantía del 40%, a diversos sectores del sector empresarial de ambas ciudades.
Desde los dos gobiernos autonómicos se acordó igualmente, que parte de esa ayuda fuera directamente a los bolsillos de los trabajadores, para que tanto unos como otros salieran beneficiados, de tal forma que en Melilla se aplica una bonificación del 4,6% en la cotización base de los sueldos de los trabajadores.
En la segunda reunión mantenida entre patronal y sindicatos, la del pasado día 21, la Confederación llevó ante la mesa dos propuestas diferentes a la primera planteada.
Por un lado, que la bonificación se entregara en su totalidad a aquellas empresas que durante el 2010 y 2011 no habían reducido su plantilla; y por otro, que también se ayudara a las empresas que durante el pasado ejercicio hubieran tenido una bajada en sus ingresos de un 10%.
De nuevo, los sindicatos volvieron a rechazar este planteamiento de la patronal, que calificaron de “inasumible”, pues según dijeron, suponía que se seguía congelando la parte de la bonificación que corresponde a los trabajadores hasta 2014.
Este próximo viernes vuelven a reunirse las dos partes con ánimo de alcanzar un acuerdo. Al menos, así lo expresó López Almendáriz, quien comentó que si bien en los dos anteriores encuentros no se había producido un acercamiento de posturas, “sí existe el espíritu de volvernos a reunir porque nunca se sabe si en una reunión posterior se puede ver algo de luz en el horizonte”.
Al mismo tiempo indicó que “hay que acudir a esta reunión  con un espíritu de sacrificio tremendo”, debido a cómo está España y Melilla. “Todos andamos mal y las empresas llevamos haciendo un esfuerzo hace mucho tiempo y yo ahora prefiero que podamos mantener las plantillas que otra cosa, y me gustaría que nadie tuviese que despedir a nadie ni que ninguna empresa tenga que cerrar, que eso sí es verdaderamente triste”.
En este sentido apuntó que la postura de la patronal es que la realidad de este año no es la misma que la del 2004. “La situación de las empresas no es la misma y el mantenimiento de las plantillas es duro, por lo que creo que este poquito oxígeno que se les da a las empresas es muy importante. Es cierto que un trabajador sí puede cobrar al mes un poquito más, pero, ¿y si deja de trabajar?, precisamente por la situación de crisis tan tremenda que hay”, planteó.

“Lo que ha pasado en Ceuta es un mal ejemplo”

Para la presidenta de la Confederación de Empresarios, Margarita López Almendáriz, el acuerdo alcanzado en Ceuta, donde empresarios y trabajadores firmaron el pasado día 5 de enero el reparto de la bonificación a las cuotas patronales “es un mal ejemplo para Melilla”.
Así, según explicó en declaraciones a El Faro, “porque fueron a lo mismo que en 2004, y yo no se si en Ceuta se han dado cuenta que vivimos en el 2012. Creo que se les ha ido un poquito la memoria  a todos los que se sentaron en esa mesa”, subrayó.
Sin embargo, sí estuvo en parte de acuerdo con la petición del presidente del Gobierno ceutí, Juan Vivas, de extender la bonificación a todos los sectores. Para López Almendáriz, esta ayuda sí debería aplicarse al sector de la Construcción –hasta ahora no incluido–, aunque matizó que “no creo que se vaya a aceptar que se aplique a los grandes sectores como Banca o Energía”, concluyó.