Según el denunciante, el acusado se subió a su vehículo cuando estaba atascado junto a La Hípica
En uno de los juicios celebrados esta semana en el Juzgado de lo Penal número 2 de Melilla, el Ministerio Fiscal solicitó una pena de un año y seis meses de cárcel para un hombre acusado de subirse a un coche que se encontraba en un atasco y hurtar el teléfono móvil del conductor. Los hechos enjuiciados sucedieron el 13 de diciembre de 2015. El acusado, que responde a las iniciales K. M., afirmó a preguntas de la acusación que conocía “de vista” al denunciante. “Le pedí que me acercara” “Yo estaba solo en el Dique Sur. Le pedí que me acercara al Florida y me llevó”, aseguró el inculpado. “¿Cómo explica que él lo denunciara por sustraerle el móvil?”, le preguntó la fiscal, que no obtuvo respuesta. “¿El denunciante era taxista?”, insistió la parte acusadora, a lo que el inculpado dio la negativa por respuesta. La abogada defensora de K. M. le preguntó si “vio” un móvil dentro del coche, a lo que dijo que no. Tras ello, entró a declarar J. A. R., el supuesto perjudicado por la sustracción del terminal, quien sólo coincidió con la declaración del acusado en que se conocían “de vista”. Sin embargo, aseguró que se lo encontró cuando conducía su coche “por la glorieta de La Hípica”. “Había mucho tráfico. Se subió a mi vehículo y me dijo que si amablemente le movía a 20 metros de donde estábamos. Creí que era una gracia que hacía con sus colegas”, aseveró el denunciante a la fiscal. “Yo no le dije que subiera, él abrió la puerta”, añadió. Tras salir el intruso del automóvil, el conductor fue a buscar su terminal “para enviar un whatsapp”. Fue entonces cuando comprobó que el móvil había desaparecido. “El teléfono estaba donde se sentó él”, afirmó. “Cien por cien seguro” “Estoy cien por cien seguro de que llevaba el móvil en el coche”. Asimismo, recordó que llamó desde otro número al dispositivo supuestamente hurtado y éste “estaba apagado”, por lo que llamó a la compañía para que lo bloqueara. La letrada de la defensa le preguntó si vio el momento en el que el otro cogía el teléfono. “No, pero deduzco que él lo hizo”. Aparte de la pena de cárcel, la fiscal pidió que se indemnice al denunciante con 470 euros, valor del móvil. Por el contrario, la defensa reclamó la absolución al afirmar que la supuesta víctima “imagina, deduce, pero no ha visto” la acción del hurto del terminal.