La oposición critica "la falta de tiempo" a la hora de estudiar el presupuesto

Falta de tiempo para estudiar el presupuesto, poca inversión en políticas sociales. Han sido sólo alguno de los argumentos esgrimidos por los grupos de la oposición para votar en contra del presupuesto de Melilla para 2025.

El primero en intervenir fue el portavoz de CpM, Emilio Guerra, quien calificó como “vacío” el discurso del presidente de la Ciudad, Juan José Imbroda.

Respecto a los tres ejes expuestos por Imbroda, Guerra insistió en que “los melillenses tenemos otras necesidades. Nosotros presentamos 4.600.000 euros en enmiendas que mejoran el presupuesto a corto plazo”.

Desde CpM critican que se haya “perdido el 1.200.000 euros para los planes de empleo” y no están de acuerdo en que haya que mirar al norte y no establecer lazos económicos con Marruecos.

Consideran también que “debería apostarse por la Formación Profesional” y que el presupuesto del 2025 contemple una partida para atender a los niños con TEA en todos los centros educativos.

“Hay que atender a los más necesitados y, por ello, reclamamos una cuantía de 200.000 euros para alimentos”, incide Coalición por Melilla.

La cifra de 50.000 euros para proteger el patrimonio cultural inmaterial, concretamente, la lengua tamazigh es insuficiente para CpM que aboga por destinar 200 mil euros a proteger este idioma.

Coalición reclama también la firma de un convenio con Ingesa para que la Ciudad Autónoma se encargue de gestionar todas las partidas relativas a sanidad.

Con relación al ámbito universitario, CpM señala que “no todo pasa por subvencionar la universidad. Nuestras enmiendas son constructivas”, defendió Emilio Guerra.

En su intervención, el portavoz de CpM hizo alusión a la nueva titulación universitaria de Inteligencia Artificial con referencia a la consejera de Políticas Sociales y salud Pública, Randa Mohamed: “espero que sea la primera que se matricule en esta nueva titulación para dar más discurso a su calado”.

El presidente de la Ciudad reprobó este comentario, reiterando que a la consejera de Políticas Sociales y Salud Pública no le “hace falta ninguna inteligencia artificial”.

Por su parte, la portavoz socialista, Elena Fernández Treviño, se mostró bastante escéptica tras la exposición del presidente de la Ciudad.

Fernández Treviño apostilló que “percibimos un desastre en la forma de elaborar un presupuesto por su rapidez. En las comisiones informativas nos ha sorprendido el desconocimiento de los consejeros en sus respectivas áreas, ya que eran los técnicos quienes tenían que explicar cada una de las partidas”.

Para la portavoz socialista la premura del presupuesto denota que “ustedes no tenían la intención de consensuar este presupuesto. Han estado modificando partidas hasta el último momento y este presupuesto es resultado de la chapuza y la improvisación”.

Treviño echó en cara al Gobierno de la Ciudad que no se haya gastado ni el 50 por ciento del presupuesto, de ahí que no estén de acuerdo con “el principio inversor” del que hablaba Imbroda.

Respecto a los trabajadores de la Administración, la portavoz socialista reprobó tener “a todos los sectores cabreados” y opina que “este presupuesto no denota proyecto de ciudad y es un presupuesto clientelar. Hay muchas subvenciones que no se justifican como la que se concede a la asociación de caridad Virgen de la Luz o a Huellas solidarias cuando hay muchas más entidades de esta categoría en la ciudad, mientras tanto desmantelan la educación pública”.

Para el Partido Socialista sólo se presentó un presupuesto repleto de “proyectos fantasmagóricos con pies de barro. Este presupuesto descuida la interculturalidad, la proyección pública” y da cabida a “grandes entelequias”.

Tras los reproches de los socialistas turno para el portavoz del Grupo Mixto, José Miguel Tasende, quien echó en cara al Gobierno de la Ciudad haber ejecutado a mitad de año “sólo el 31 por ciento del presupuesto” y criticaron al Gobierno “haber despedido a trabajadores de guarderías”.

Por otra parte, Tasende insta a “suplicar los trámites” y a “invertir en reintegrar a los menores no acompañados con sus familias”.

El portavoz del Grupo Mixto, definió, además como “ciencia ficción” las cifras del padrón municipal.

Amin Azmani, de Somos Melilla, comenzó su intervención echando en cara “el poco margen al diálogo en estos presupuestos y después de cómo han ejecutado los del 2024 me arrepiento de no haberme abstenido en su momento. Ustedes piden unidad con una mano y con la otra desprecian cualquier propuesta”.

La falta de tiempo a la hora de estudiar el presupuesto fue una de las premisas que puso sobre la esa Azmani durante su exposición: “sólo hemos tenido 10 días hábiles para estudiarlo. Yo entregué 22 enmiendas y no las trataron”.

En las enmiendas presentadas por Somos Melilla se contemplan “becas o ayudas para los barrios más desfavorecidos. Estos presupuestos consolidan millones de euros en subvenciones a dedo. Ustedes priorizan festejos, publicidad, pero las necesidades básicas las relegan”.

Durante su intervención, Azmani también criticó las inversiones en “cargos de confianza”.

La portavoz del Gobierno, Fadela Mohatar, respondió a estas intervenciones, señalando que “estos argumentos se desmontan por si solos”. Respecto al tiempo de estudio del presupuesto, Mohatar recordó al portavoz de Somos Melilla que “ustedes nos presentaron unos presupuestos en menos de 36 horas”.

Mohatar esgrimió que el presupuesto presentado por el presidente de la Ciudad “continua el complicado sendero ante el que nos encontramos ante un Gobierno de España que no actúa ante la hostilidad de Marruecos. Además, nos fustigan fiscalmente”.

En este sentido, la portavoz del Gobierno en alusión al Partido Socialista subrayó no entender “que frivolicen con ese ataque frontal del Gobierno de España que ha dejado perder 16 millones de euros de los planes de empleo” y añadió que “nuestros presupuestos están elaborados para preservar una senda sembrada de grandes proyectos”.

Aunque la oposición criticó la falta de partidas destinadas al ámbito social, Fadela Mohatar fue tajante al afirmar que “tenemos uno de los presupuestos más sociales de la historia. No se pueden poner palos en las ruedas de un presupuesto destinado a apuntalar toda una legislatura. Nosotros no somos menos que ningún territorio y eso lo tienen que defender todos los territorios”.