Los primeros quince días de la Operación Paso del Estrecho (OPE) han sido más tranquilos de lo que se esperaba. Así lo afirmó ayer el consejero de Seguridad Ciudadana, Isidoro González, en declaraciones a El Faro. González indicó que por el momento ni siquiera se han tenido que utilizar las explanadas que se habían habilitado para acoger a unos 300 vehículos cuando se produjeran llegadas importantes. González apuntó que el momento más fuerte se espera a partir de esta semana, pero insistió en que aún así la situación está siendo mucho menos complicada de lo que se había previsto.
Hay que recordar que la Ciudad ha preparado este año un ambicioso plan para la OPE. Fomento, Medio Ambiente y Seguridad Ciudadana han colaborado para evitar que se produjeran colapsos. El incremento del comercio atípico, unido a las obras del centro comercial que se está construyendo cerca de Beni Enzar y a la previsión de que la afluencia de personas y vehículos fuera mayor que el año pasado llevaron a las tres consejerías a ponerse manos a la obra para reducir al máximo el impacto.
Sin embargo, por el momento, la situación está siendo tranquila. González señaló, además, que los medios que se han colocado para canalizar mejor a los porteadores y al resto de peatones que pasan por el paso fronterizo de Beni Enzar están funcionando bien. Indicó que el objetivo de esta actuación es evitar que crucen por mitad de la calzada y provoquen problemas a los vehículos. Señaló que se han instalado pivotes, vallas y barreras ‘New Jersey’ para organizar mejor los cruces. “A veces hay cierta anarquía que era necesario evitar”, aseveró González.
Obras que se alargan
Eso sí, el consejero de Seguridad Ciudadana reconoció que las actuaciones previstas para esta OPE aún no están concluidas, a pesar de que la previsión era que todo estuviera listo para el día 15 de junio, fecha en la que arranca oficialmente esta operación. González dijo que ha sido una cuestión de plazos con los encargados de realizar los trabajos, que inicialmente dieron una fecha de finalización, pero se han ido retrasando.
En cualquier caso, el responsable del área de Seguridad Ciudadana se mostró totalmente convencido de que para esta misma semana todo estará listo. Señaló que falta por concluir una pequeña obra en la parte de la carretera donde se da el último giro de camino a la frontera y la colocación de más vallas para canalizar a los porteadores.
El consejero apuntó que afortunadamente el tránsito de vehículos no ha sido aún muy elevado. “Si hubiera habido más coches me habría preocupado más que no estuviera la obra concluida, pero afortunadamente no ha sido así”, aseveró.
González indicó que los operarios han estado trabajando este fin de semana para que a partir de mañana todo esté listo.
Asimismo, apuntó que los baños ya están instalados y el grueso de la actuación terminado.
Sin incidencias
El consejero recalcó que por el momento no se ha producido ninguna incidencia importante, pero reconoció que habrá que ver cómo se desarrolla la operación a partir de ahora, cuando se espera que lleguen más viajeros.
Hay que señalar que el principal cambio previsto para esta OPE era el desvío del tráfico por General Astilleros en lugar de por General Villalba, como venía ocurriendo en años anteriores. Con esta variación se daba respuesta a una reivindicación de los vecinos del Real, que protestaban por los ruidos y los problemas de tráfico.
La OPE, una prioridad
Además, desde la Delegación del Gobierno se ha limitado el horario del paso de mercancías por Beni Enzar durante la OPE, para evitar aglomeraciones y se advirtió de que si llegara a ser necesario también se harían restricciones en Farhana para utilizar la circunvalación. No obstante, si la tendencia continúa como estas dos primeras semanas, no parece que vaya a ser necesario optar por esta alternativa.
Tanto desde la Ciudad como desde la Delegación del Gobierno han insistido este año en que la prioridad será el buen funcionamiento de la OPE, aunque sea necesario adoptar medidas algo impopulares como la limitación del horario en Beni Enzar.
Cabe señalar en este punto que esta decisión ha despertado el malestar entre los comerciantes de la zona de la frontera y entre los propios porteadores. Los segundos han protagonizado varias protestas en la zona denominada como tierra de nadie que han provocado cierres del paso fronterizo en el lado marroquí. Asimismo, la asociación de comerciantes Acsemel ha realizado varias concentraciones, la última ayer mismo, para mostrar su malestar por una medida que según ellos, está perjudicando, a sus negocios.
Ante esta realidad, el delegado del Gobierno, Abdelamlik El Barkani, ha insistido en todo momento en que se ha elegido la mejor opción para la mayoría y en que el objetivo final es lograr que por Beni Enzar no se pasen bultos, sino que sea un paso exclusivamente para turistas.
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