La línea 6 de la COA volverá a funcionar cuando haya una denuncia

El consejero de Medio Ambiente y Naturaleza, Daniel Ventura, ha desvelado a El Faro que hay un vecino de la zona de la Cañada de Hidum que observó quién fue el ciudadano que apedreó el autobús de la línea 6 de la COA, a Mariguari, la última vez y que este lunes por la noche pondrá una denuncia, por lo que iba a recomendar a la Cooperativa Ómnibus de Autobuses que pusiera en marcha de nuevo el servicio. Desde la COA, por su parte, han confirmado que el servicio comenzará otra vez a funcionar en breve, contando con el tiempo que logísticamente sea necesario, una vez que esté puesta la correspondiente denuncia.

Ventura había apoyado el cierre de la línea, sobre todo por seguridad, porque, más allá de que se rompa un cristal, alguien podría resultar herido o incluso morir y porque no se trata de algo puntual, sino que ya van dos veces este año. “No quedaba otra que cerrarlo, porque, aunque no es un servicio que gestione la Ciudad Autónoma de momento, hay un problema serio, que es la seguridad de las personas”, ha explicado el consejero sobre este asunto.

Tanto Ventura como representantes de la COA han remarcado que, durante años, ha habido personas en la Cañada que han apedreado a la Policía, a los Bomberos y a las ambulancias, pero que es precisamente la gente que vive en el barrio, en especial los mayores, los primeros que quieren resolver el problema.

Por lo tanto, Ventura se ha mostrado “feliz y contento” de comprobar que existe colaboración de ciudadanos que quieren lo normal: disfrutar de los servicios públicos y mejorar los barrios. “Me alegro un montón de que la colaboración ciudadana funcione y sirva para mejorar la convivencia”, ha apuntado.

Desde la COA, su asesor, Lino Ferrer, ya había indicado que estaban de acuerdo con el consejero en que era necesario que los vecinos del barrio fueran quienes señalaran a las personas que tiran las piedras para evitar que hubieran damnificados que no merecen la suspensión del servicio y pagaran justos por pecadores.

“Los vecinos tienen que tomar cartas en el asunto y preguntarse si quieren estar en la Edad Media o tener un servicio como el resto de la ciudad”, han indicado desde la COA en este sentido antes de conocer la denuncia, y han reiterado que, “si mañana saliera la persona que ha tirado la piedra, la línea se pondría en marcha automáticamente”.