Los bonos turísticos seguirán existiendo para que sea posible que los no residentes puedan viajar a Melilla a precios razonables. Al menos, hasta que el Gobierno central haga una declaración de Obligación de Servicio Público (OSP) para las líneas aéreas de Málaga y Madrid, según ha afirmado en Onda Cero el consejero de Turismo, Miguel Marín.
La OSP evitaría a la Ciudad Autónoma que tenga que poner 5 millones de euros sobre la mesa para poder financiar el 75% del precio de los billetes para los visitantes. De hecho, esa declaración tiene por objeto, entre otras cuestiones, que se establezca el tope máximo del coste de los pasajes, de manera que se abarata el transporte aéreo para todos los usuarios, sean o no de Melilla.
Pero el Gobierno central se ha negado, al menos de momento, a realizar esa OSP, según declaró hace unas semanas la delegada, Sabrina Moh. En consecuencia, el Ejecutivo melillense mantendrá los bonos. "Hasta que no nos den a OSP nosotros no podemos dejar a la ciudad desamparada porque cuando viene un turista aquí se aprovechan muchos sectores de ello".
Tan es así que sus datos apuntan a que la inversión en esos bonos "se multiplica al menos por cuatro de retorno", lo cual convierte ese gasto "en una inversión positiva" de la que se benefician taxis, comercio, hostelería, restauración y hoteles, fundamentalmente.
El transporte es una competencia estatal. En los últimos 40 años, se han construido centenares de autovías, autopistas y carreteras para garantizar la conectividad en España. Ello, sin contar con los miles de kilómetros de vía de alta velocidad para los trenes. En definitiva, se trata de inversiones de las que Melilla no ha podido beneficiarse.
Por ese motivo, Marín pide al Gobierno de Sánchez que "ponga el dinero necesario" para que los precios de los vuelos de Málaga y Madrid no sean tan elevados y se pueda viajar, residentes y no residentes, con costes razonables.
Hay que tener en cuenta, además, que el mercado aéreo de Melilla es prácticamente un monopolio y eso impide que la propia competencia baje los precios. Por ahora, tal y como confirmó Marín, no existen contactos con otras compañías aéreas para que operen en el aeropuerto local.
"Ya nos gustaría, pero no depende de nosotros. No ha habido ningún contacto en ese sentido y aquí lo que sí debemos hacer es aumentar el número de turistas, hacer que Melilla sea un destino atractivo y otros operadores quieran venir a la ciudad", indicó.