La Guardia Civil detuvo el pasado viernes a un hombre que llevaba 171 bellotas de hachís en el estómago. La intervención se realizó en una inspección de pasajeros que iban a embacar en el J.J. Sister con destino a Málaga. Los agentes observaron algo sospechoso en el hombre y procedieron a realizarle una radiografía abdominal en las dependencias de los servicios de Aduana. Tras hacerle la prueba, comrprobaron que el viajero, un hombre de 32 años y con domicilio en Murcia, tenía “un número indeterminado de bellotas”.
Dos días después, el domingo, finalizó la evacuación de la droga que el hombre tenía en el interior de su cuerpo. Los agentes contabilizaron un total de 171 bellotas, con un peso de 1,1 kilos de hachís.
No es la única intervención que ha realizado la Guardia Civil en el puerto en los últimos días. En total, la semana pasada los agentes del Instituto Armado intervinieron 69 kilogramos de droga en el puerto de Melilla en ocho actuaciones. Los estupefacientes se hallaron en los registros rutinarios que se realizan a vehículos y personas que embarcan en los buques con destino a la península. En total han sido detenidas nueve personas por estos delitos.
La primera intervención se realizó en la mañana del pasado jueves, cuando se inspeccionó un turismo SEAT León de matrícula francesa, ocupado por un hombre, donde fueron encontrados 47 paquetes que contenían 20,5 kilos de polen de hachís.Los guardias civiles detuvieron al conductor, un joven francés de 24 años, con domicilio en Francia, que según la Guardia Civil era el posible destino de la droga.
Unos días antes, mientras los agentes inspeccionaban una furgoneta Mercedes ocupada por un individuo, encontraron otros 76 paquetes con 25,2 kilos de polen de hachís. La droga estaba oculta en un doble fondo, en el suelo de la parte delantera del vehículo. El ocupante del vehículo también fue detenido. Era un un ciudadano marroquí de 32 años, con domicilios en Cáceres y Almería.
Además de estas dos, la Guardia Civil también halló droga en otros cuatro registros a vehículos, donde se incautaron “diversas cantidades de hachís y sus derivados”. En dos de estas actuaciones, la droga fue localizada en el interior de los reposacabezas de los vehículos.
La segunda, tuvo lugar este domingo, al proceder al reconocimiento de un equipaje de mano, donde fueron localizados dos envases de fiambre de ave, que contenían treinta pastillas de pólen de hachís,con peso de casi tres kilos.
El detenido era un joven español de 20 años de edad, vecino de Melilla, que atiende a las iniciales T.A.S.
Los nueve detenidos han sido puestos a disposición judicial como supuestos autores de un delito contra la salud pública, junto a la droga intervenida en las ocho actuaciones, con un peso total de unos 69 kilogramos, así como los vehículos y enseres utilizados como instrumentos para la comisión de los delitos, según informó ayer a través de una nota de prensa la Comandancia de la Guardia Civil de Melilla.
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