Realizaron movimientos durante toda la madrugada en las cercanías del perímetro fronterizo. En ningún caso lograron acercarse a la valla, según fuentes policiales.
La Guardia Civil avistó durante la madrugada del lunes al martes grandes grupos de inmigrantes al otro lado de la valla fronteriza que separa la ciudad autónoma de Marruecos, aunque no llegaron a acercarse al perímetro.
Según fuentes policiales, se calcula que en varios grupos podía haber hasta 600 subsaharianos. Durante toda la madrugada realizaron “diversas maniobras” en las zonas cercanas a la valla, aunque en ningún caso lograron acercarse.
La situación en la frontera continua siendo de máxima alerta debido a la extrema presión migratoria que sufre Melilla en las últimas semanas y que se ha acrecentado tras los últimos asaltos registrados la semana pasada y el pasado lunes.
Según la Delegación del Gobierno, la colaboración marroquí está siendo “fundamental” para evitar nuevos intentos de entrada, como el protagonizado el lunes por unos 50 subsaharianos, de los que al menos cinco lograron su objetivo de llegar a Melilla.
Tal y como señaló Prodein a este periódico el domingo, el país vecino está realizando redadas para alejar a los inmigrantes de las zonas próximas a Melilla, si bien los últimos datos facilitados por la Delegación del Gobierno hablan de la presencia de una bolsa de unos mil subsaharianos en las cercanías de la ciudad autónoma.
La situación es “límite”, ya que los inmigrantes buscan a la desesperada acceder a territorio español, ante la llegada del invierno y el endurecimiento de las condiciones que deben soportar en Marruecos, según las fuentes.