La Delegación del Gobierno sigue sin saber la fecha en que podría reabrir la aduana comercial con Marruecos, si bien ha dejado de manifiesto que los puntos de inspección tanto de productos no animales como de animales (éste con algún trámite aún por cumplir) están listos. Así lo aseguró la delegada, Sabrina Moh, a los representantes de la Asociación de Comerciantes, Empresarios y Profesionales de Melilla (Cepromel) durante la reunión que mantuvo con ellos al mediodía de este miércoles. La organización puso de manifiesto la "incertidumbre" que existe con respecto a la aduana y argumentó que la entrada de frutas, verduras y pescado desde Marruecos permitirá una bajada inmediata de los precios "y en definitiva se ofrecería un producto más fresco y más asequible, lo cual evidentemente ayudaría a reactivar la actividad comercial".
Cepromel también puso sobre la mesa el problema del régimen de viajeros por cuanto que Marruecos niega cualquier posibilidad de introducir productos en su territorio si parten desde Melilla. "Hemos insistido en la necesidad de negociar con Marruecos, a nivel de ministerios, el restablecimiento del régimen de viajeros en ambas direcciones. Mientras no se respete este aspecto por parte de Marruecos, se puede afirmar que los potenciales clientes del país vecino no tienen muchos alicientes para venir a Melilla, ya que como todos sabemos, principalmente acudían para hacer compras. No es de recibo que el régimen de viajeros se aplique sólo en una dirección y que las autoridades marroquíes apliquen mano de hierro con los artículos de uso o consumo propio en el tránsito de aduanas". Sobre este asunto, la asociación no ha manifestado cuál fue la postura de Moh.
En este encuentro, la delegada también manifestó a los empresarios que tomará cartas en el tema de la seguridad en la zona del Rastro y expresó en ese sentido un "compromiso explícito" con la entidad de plantear el asunto en la próxima Junta Local de Seguridad.
Asimismo, estos empresarios y profesionales pusieron en conocimiento de la delegada su "malestar" por el nuevo sistema de bonificación de la Seguridad Social y afirman que "supondrá un desembolso inasumible para la gran mayoría de empresarios de la ciudad, que además tendrían que asumir costes adicionales, aparte de verse obligados a iniciar los trámites exigidos y cumplir con los requisitos establecidos para solicitar la supuesta 'subvención”' que además tendría que tributar. En este sentido coincidimos con todas las asociaciones empresariales de Ceuta y Melilla, ya que es una reivindicación común planteada desde el momento en que se publicó el Real Decreto que suprime las bonificaciones".
A ese respecto, afirma Cepromel que la delegada del Gobierno se comprometió a trasladar el malestar a la Administración Central tras conocer el alcance y las consecuencias de esta medida. "La delegada se ha comprometido a trasladar este malestar a la Administración Central e insistir que se trata de una reclamación conjunta de empresarios y autónomos", concluye.
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