la Comisión Islámica de Melilla (CIM) se ha manifestado al respecto del episodio acaecido el pasado viernes día 9 de agosto en la Mezquita Central. El imán de este templo presentó una denuncia en el juzgado de instrucción contra el vigilante de seguridad de dicho templo por un presunto delito contra la libertad religiosa, así como por sendos delitos de amenazas y coacciones.
La CIM manifiesta que en ningún momento se impidió la entrada del anterior jatib a la mezquita, quien se encarga de pronunciar el sermón o jutba los viernes.
"Los hechos han sido malinterpretados o malintencionadamente distorsionados".
Desde la CIM aseguran que el trabajador actuó de acuerdo con las directrices establecidas, permitiendo la entrada del jatib, aunque impidiéndole dar el sermón, el cual se había designado a otro jatib, quien ya tenía la autorización verbal por parte de las autoridades religiosas competentes.
La entidad quiere subrayar que el anterior jatib, tras recibir verbalmente su cese por parte de dichas autoridades religiosas, participó en la oración sin oponerse a la decisión tomada, rezando detrás del nuevo jatib sin que hubiera ninguna alteración o acto de protesta por parte de los asistentes. La CIM añade a este respecto que una semana antes, el jatib cesado contactó con las autoridades religiosas encargadas de la regularización de la situación de los imames en las mezquitas interesándose por su situación y le transmitieron la decisión "firme e irrenunciable" de no contar más con él.
Sostienen que este incidente ha sido interpretado erróneamente como un conflicto mayor cuando, en realidad, se trata de un asunto interno relacionado con la gestión religiosa de la mezquita, en el cual, afirman, se ha intentado involucrar al anterior jatib para servir a intereses que no han sido claramente expuestos.
"La Comisión Islámica de Melilla lamenta profundamente que algunos hayan intentado manipular esta situación para fines personales o ajenos a los intereses de la comunidad".
Por otro lado, quieren recordar que el Consejo Religioso Musulmán, asociación que según dicen, apoya actualmente al jatib; contactó hace unos meses con las autoridades de la Mezquita Central a las que comunicaron que no querían contar más con sus servicios. "Precisamente fue la actual directiva de dicha mezquita quien defendió lo contrario", aseveran.
Asimismo, afirman que algunos directivos del Consejo Religioso Musulmán también mantuvieron una reunión con responsables de la CIM para mediar y profundizar sobre los conflictos relacionados con la dirección de dicha mezquita. En este sentido, la entidad aboga por por celebrar elecciones para nombrar una Yamaa de consenso.
Consideran necesario recordar que tanto la designación como el pago de los imanes y jutabas en Melilla son competencia exclusiva de las autoridades religiosas competentes. El objetivo de esta medida no es otro que la prevención de discursos radicales y extremistas.
"Este proceso se realiza con el fin de garantizar que las personas que lideran las oraciones y sermones en nuestras mezquitas cumplan con los requisitos religiosos y administrativos establecidos".
Por ello, la Comisión manifiesta que si el jatib cesado tiene alguna discrepancia, debe seguir los cauces adecuados, dirigiéndose directamente a dichas autoridades para discutir su situación. Además, asegura que, en caso de que las autoridades religiosas competentes reconsideren su decisión y lo reinstauren en su cargo, la comunidad respetará y acatará dicha decisión de manera plena y conforme a los principios de la fe islámica.
La CIM destaca que la Mezquita Central lleva desde el pasado mes de enero en boca de los fieles por las "continuas bagatelas internas". También aseguran que en más de una ocasión, los responsables han solicitado la mediación e intermediación de la CIM. "Algo que siempre hemos hecho con el fin de apaciguar los ánimos tan caldeados".
También llegan a afirmar que Incluso la semana pasada la cosa podría haber ido a más el pasado viernes, de no ser por la mediación de la propia entidad. "Entendemos que la seguridad de los fieles está por encima de todo".
Por último, la Comisión Islámica quiere reafirmar su compromiso con la unidad y la paz dentro de la comunidad islámica en Melilla. Para ello, hacen un llamamiento a todos los miembros de la comunidad a mantenerse informados a través de canales oficiales, evitando la propagación de rumores o informaciones infundadas que solo buscan sembrar discordia.
"Agradecemos a toda la comunidad su comprensión, paciencia y apoyo en la resolución de este asunto. La Comisión Islámica de Melilla seguirá trabajando incansablemente para asegurar que nuestros espacios religiosos sean lugares de paz, oración, unidad y de convivencia, lejos de conflictos y separatismos".
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