La Cooperativa Ómnibus de Autobuses (COA) confía en que va a llegar a un acuerdo lo antes posible con la Ciudad Autónoma para el pago de la deuda de la empresa, que asciende a 1,6 millones de euros, aproximadamente.
Según ha explicado el asesor de la COA, Lino Ferrer, a El Faro, el montante se divide en dos categorías. Primero, unos 830.000 euros de deuda judicializada para la que se está intentando llegar a un acuerdo extrajudicial con la Ciudad. Ferrer ha asegurado que, después de la firma de un documento donde ambas partes se dan un plazo de 60 días para negociar, “parece que todo va por buen camino” para alcanzar un trato intermedio que sea positivo para todos.
En cuanto a la parte que no está judicializada –alrededor de 790.000 euros correspondientes a los años 2019, 2020, 2021 y 2022–, el asesor de la COA ha desvelado que la Ciudad Autónoma les ha dicho que se va a hacer una modificación presupuestaria para que la empresa pueda cobrar esa deuda también entre 2023 y 2024, pero “casi entera” antes de final de año.
Lino, quien ha querido confiar en la palabra dada por el consejero de Medio Ambiente y Naturaleza, Manuel Ángel Quevedo, para estos pagos, ha recordado que el transporte público es casi siempre deficitario. Además, en Melilla se unen otros dos componentes. El primero es el cierre de la frontera en 2020, que está ocasionando, admitió, “muchos problemas de liquidez” en la COA y que ha hecho dispararse el déficit, según su asesor. En segundo término, está el hecho de que en Melilla la empresa de autobuses ha venido trabajando desde siempre sin contrato.
Además, y pese a las ayudas que han llegado desde la Unión Europea (UE) y del Gobierno en el precio de los combustibles, como el descuento de 20 céntimos por litro de combustible para el transporte profesional por carretera y otras subvenciones, el encarecimiento de la gasolina motivado por la guerra de Ucrania ha provocado que el transporte público haya sido uno de los sectores más castigados. “No quiere decir que nosotros seamos especiales, pero hemos tenido que seguir prestando un servicio y las pérdidas han sido millonarias”, ha anotado el asesor de la COA.
Pese a todo, y debido a las promesas efectuadas desde el Gobierno local, la empresa de autobuses no pierde la esperanza. De hecho, según le han comentado a Lino, ya está en el borrador de los Presupuestos Generales de la Ciudad para 2024 la licitación de un contrato que permitiría regular el transporte, algo que vienen demandando desde la COA desde hace mucho tiempo.
Aunque, de esta forma, la empresa podría perder la ventaja de que goza actualmente y es posible que otra empresa de llevara el contrato, ya que se trata de una licitación abierta, Lino cree que es algo bueno, sobre todo, porque permitiría regularizar tanto a los trabajadores como a los cooperativistas. Por el momento, no tienen constancia de que haya ningún otro interesado, aunque lo habitual en estos casos es que haya más de un candidato.
“Evidentemente –ha apuntado–, la COA se presentará con la ilusión de ganar el concurso". "Ganará el mejor. Nosotros haremos nuestra oferta, intentaremos llevarnos la concesión y seguir prestando servicio en Melilla, pero siempre bajo el amparo de la ley y hecho todo con la mayor transparencia posible”, ha añadido.
Eso sí: desde la COA confían en presentarse a esa licitación –cuando se produzca– con los pagos pendientes efectuados, o, lo que es lo mismo, “con las mismas condiciones que cualquier empresa, no con una deuda millonaria”.
“Siempre ha habido este problema en el transporte público y con la deuda y a nosotros lo que nos han dicho es que, por fin, nos lo van a pagar, que vamos a llegar a un acuerdo para que se pague esa deuda y poder presentarnos en igualdad de condiciones que cualquier otra empresa”, ha reiterado Lino.
De hecho, en la actualidad, la empresa no se plantea otro escenario que no sea este: cobrar las deudas y presentarse a la licitación el año que viene. Si no se le pagara el dinero pendiente, según Lino, se entraría en otro “escenario” que habría que plantear a la Ciudad.
Porque, al final, ha reiterado, “todo va de la mano” y no se trata de un problema solamente de la COA, sino algo “más genérico” que engloba todo el transporte público.
De hecho, Lino ha hecho mucho hincapié en que aunque, ahora mismo, es la COA la que presta el servicio de autobuses, lo que hay que solucionar es el problema del transporte público y también de los trabajadores de la COA, para que, si llega otra empresa, éstos puedan pasar a su plantilla.
En definitiva, ha resumido Lino, aunque se trata de un asunto “complejo” y que necesita de la “voluntad de unos y de otros”, en estos momentos se está marchando “por el camino correcto”.
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