La Ciudad anuncia una limpieza exprés de Horcas Coloradas para abrirla este verano

El presidente Imbroda informa de que la Mesa de Contratación ya tiene un proyecto de 600.000 euros para la limpieza del fondo más próximo a la playa. La recuperación de litorial norte costará 12 millones de euros. El presidente de la Ciudad, Juan José Imbroda, anunció ayer los planes de su Gobierno para recuperar la playa de Horcas Coloradas y abrirla al público a finales de este verano, a través de un proyecto exprés de limpieza del fondo más próximo a la orilla que permita el baño a los melillenses en condiciones mínimas de seguridad. Este proyecto que ya está en la Mesa de Contratación, tal y como dijo el mandatario autonómico, supondrá una primera inversión de 600.000 euros.
Imbroda explicó que la inversión de la Ciudad Autónoma será de entre 10 y 12 millones de euros para el proyecto global en el litoral norte. El portavoz del Ejecutivo local, Daniel Conesa, esbozó el pasado viernes el proyecto que tiene planteado la Ciudad hasta 2015 y aunque no aseguró que se pudiera permitir el baño este verano sí apuntó que la playa estará equipada.
El mandatario autonómico esbozó las actuaciones principales que se incluyen en este proyecto, pues el consejero de Medio Ambiente, José Ángel Pérez Calabuig,  explicará en los próximos días, con planos en la mano, los detalles de este proyecto para recuperar el litoral norte melillense.
“La playa será más grande, se ganará terreno y se conservará la arena que se aporte”, aseguró el presidente de Melilla, pues finalmente se construirán dos diques, uno al norte y otro al sur de la playa de Horcas Coloradas para consolidar la arena y que ésta no se pierda por los efectos del Poniente y el Levante melilense.

Final del verano
El mandatario autonómico explicó que el proyecto de limpieza del fondo más próximo a la playa ya está en la Mesa de Contratación, listo para su próxima adjudicación. Imbroda confía en que en junio se haya adjudicado y para finales del verano se pueda abrir al público y permitir el baño al menos durante un mes y que los melillenses puedan aprovechar la única playa abierta al mar que tiene Melilla.
El pasado año también se limpió el fondo próximo a la orilla, debido a la presencia de restos metálicos y punzantes, procedentes del vertedero de inertes que existía antes de la construcción de la carretera de acceso al litoral norte. A pesar de las sucesivas limpiezas que se han ido haciendo, el oleaje ha ido sacando a la superficie más residuos de estas características que obligaron a la Ciudad Autónoma a prohibir el baño en la zona por el peligro que suponía para la integridad física de los bañistas.
De hecho, se han registrado varios casos de melillenses que han sufrido cortes mientras pasaban su día de la playa en Horcas Coloradas.

Diques de contención
La parte del proyecto que más inversión necesitará, al menos dos millones de euros, será la instalación de dos diques de contención, uno al norte y otro al sur de la playa. Según explicó el presidente de la Ciudad, su instalación permitirá que los metros cúbicos de arena que se aportarán al litoral no se pierdan por el efecto del oleaje y consolide el litoral norte, ganando superficie al mar.
De hecho, Imbroda aseguró que ya se está en conversaciones con la Comandancia General de Melilla y el Ministerio de Defensa para ampliar en un tercio más la zona de la playa de Horcas Coloradas habilitada para el baño. En la parte superior del acantilado se encuentra el polvorín y la zona de prácticas de tiro de la Comgemel, que supuso que únicamente los melillenses pudieran disfrutar de la mitad de la extensión de la playa en el momento de su apertura al público.
El mandatario melillense dijo confiar en que estos diques de contención puedan instalarse el próximo año y así tener “una playa en condiciones, muy distinta a la que hay ahora”.
Por último, el grueso del proyecto se lo llevarán las tareas de limpieza del fondo marino para retirar los restos del antiguo vertedero de inertes que aún siguen allí. Imbroda criticó que el anterior Gobierno socialista no limpiara primero el fondo marino antes de construir la carretera de acceso, pues de ese modo, una vez terminada la obra, los melillenses ya habrían podido disfrutar de la playa.