Medio Ambiente afirma que la obra será compleja y hay que entrar en 630 casas para la reforma
La Consejería de Medio Ambiente presentó ayer un nuevo proyecto para la mejora de la distribución del agua. En concreto, se instalarán más de siete kilómetros de tuberías en La Cañada de Hidum con el objetivo de mejorar la red de abastecimiento y evitar que, cuando haya una avería, la mayor parte del barrio se quede sin suministro. Se invertirán más de dos millones de euros y parte de la financiación se realizará por Fondos Europeos. El titular de Medio Ambiente, Manuel Ángel Quevedo, destacó que la instalación de las tuberías nuevas, muy necesarias porque hay roturas debido a que la red actual es antigua, será un trabajo lento y completo. Quevedo indicó que este proyecto tiene un periodo de ejecución de unos 18 meses. De hecho, apuntó que habrá zonas restringidas para las máquinas debido a la estrechez de las calles de La Cañada. Eso implicará que habrá áreas donde el trabajo que se tendrá que realizar sólo con la intervención de los obreros. 630 obras dentro de hogares Además, otro asunto que influye en el tiempo que llevará este proyecto es que hay que entrar en muchas casas para poder sustituir las tuberías. En este sentido, el consejero comentó que, como la construcción de los hogares no se ha realizado de forma planificada por la Administración, la red pasa por debajo de los pisos. En concreto, habrá 630 acometidas dentro de las viviendas. Quevedo indicó que el proceso está en licitación y el límite de las empresas para presentar sus ideas estará abierto hasta el 23 de este mes. Será en mayo cuando se puedan iniciar los trabajos. El consejero afirmó que este plan es muy importante para la Ciudad porque también permitirá ahorrar agua cuando haya una rotura. Subrayó que cuando hay una avería se tarda en localizar y al haber pocas llaves de paso, se corta el suministro a un gran número de vecinos. Con el nuevo proyecto, será más sencillo este proceso para resolver las averías, además se hará una red en forma de anillo y se instalarán once bocas de incendio en el barrio que ayudará a los Bomberos a extinguir incendios. Por otro lado, Quevedo comentó que este plan de actuación en La Cañada también tiene su importancia porque se trata del 16% de toda la red de distribución del agua en Melilla.