Como “tercermundista” califican desde la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) de Melilla que en los puestos fronterizos sigan existiendo todavía garitas con agentes en lugar de implantar otros sistemas más avanzados. Por ello, reclaman, por ejemplo, la colocación de un escáner de detección para controlar los camiones como el que disponen en el puerto de Algeciras, según fuentes de esta entidad.
Con este escáner se podría ver con claridad el interior de los camiones, detectando si se pretende pasar droga o incluso si hay personas en dobles fondos.
Fuentes de la AUGC explican así que habría que apostar por implantar un sistema de videovigilancia, con sensores de movimiento y mecanismos de detección por infrarrojos en los puestos fronterizos para no dejar toda la responsabilidad en manos de los agentes.
El colectivo hizo estas declaraciones un día después del salto a la valla que se produjo el lunes por parte de cuatro inmigrantes que entraron a Melilla por la zona de Beni Enzar. Uno de ellos fue detenido por las heridas que causó a dos guardias por mordeduras y arañazos. La AUGC estima así que hay que modernizar los pasos fronterizos y el perímetro para evitar que agresiones de este tipo puedan producirse.
Fuentes de la asociación consideran que está creciendo la presión migratoria irregular tanto en Melilla como en Ceuta y aseguran que una parte de esas personas mantienen una actitud “hostil”. “No todos tiran piedras ni todos muerden pero sí hay personas agresivas”, puntualizan.
Cuerpo a cuerpo
En esos momentos de tensión, se produce un enfrentamiento “cuerpo a cuerpo” entre los migrantes y los agentes en el que se pone en peligro la integridad física de unos y de otros.
La AUGC denuncia así la situación de “inseguridad” que viven los agentes de la Guardia Civil de Melilla que trabajan tanto en los controles como en el perímetro fronterizo.
Reclaman un nuevo catálogo de puestos de trabajo porque el actual está “desfasado”
La falta de efectivos es una de las principales críticas de la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) de Melilla. Pero señalan que no es el principal problema. A su juicio, lo que complica aún más las cosas es que el catálogo de puestos de trabajo está “desfasado”.
Cuando se realizó la ordenación de los puestos, no había ni tantas compañías navieras que operaran en Melilla ni tanto comercio atípico, con la consiguiente carga de trabajo que estas circunstancias han traído para los efectivos de la Benemérita.
La AUGC entiende que se ha creado una nueva situación y hay que hacer una nueva reestructuración porque el antiguo catálogo de puestos de trabajo ya no sirve.
El 60% de la actividad se centra ahora en los pasos fronterizos de Beni-Enzar y Farhana, que están sobreexplotados por el gran volumen de trabajo que soportan a diario.
Por otra parte, criticaron que lo que se ha estado haciendo hasta ahora es realizar pequeñas inversiones que no solucionan el problema. Desde la Asociación Unificada de Guardias Civiles de Melilla demandan así una inversión real para mejorar las infraestructuras en los puestos fronterizos.
Piden el refuerzo “urgente” de los grupos de antidisturbios
La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) viene denunciando desde hace tiempo la falta de efectivos en la Comandancia de Melilla. Según fuentes del colectivo, esa carencia se notó el lunes durante el salto a la valla de cuatro inmigrantes de un grupo de cuatrocientos que intentó acceder a territorio español en medio de una situación de “violencia” por parte de los migrantes. Además del aumento de plantilla, reclaman el refuerzo “de manera urgente” de efectivos de las Agrupaciones Rurales de Servicios (ARS) en nuestra ciudad.
Fuentes de la AUGC concretaron que todos los meses vienen a nuestra ciudad unidades de los conocidos como antidisturbios dependiendo de la presión migratoria que haya. Actualmente hay entre tres o cuatro grupos (de 20 guardias cada uno) pero hay días en los que no opera ninguno porque son insuficientes y no da para cubrir los descansos del personal.
El sindicato considera que harían falta entre cinco y seis grupos para atender correctamente las necesidades dado que entienden que se está produciendo un aumento de la presión migratoria en Melilla, que se extiende también a Ceuta y a las costas andaluzas.
Además, demandan también el citado aumento de la plantilla de la Guardia Civil. Actualmente hay 650 agentes (640 a efectos prácticos) y consideran que harían falta entre 1.000 y 1.100 para atender correctamente las necesidades de una ciudad como Melilla.
También lamentan que no hayan venido agentes de prácticas y critican que el personal en comisión de servicios solo se haya destinado al puerto pero no a cubrir las necesidades del perímetro ni a los controles fronterizos.
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