La Asamblea de Melilla aprobó este sábado la Cuenta General de 2017, aunque lo hizo únicamente con los votos de los diputados del Partido Popular (PP) y de Populares en Libertad (PPL), que suman doce en total. El resto de formaciones, Coalición por Melilla (CpM), Partido Socialista Español (PSOE) y Ciudadanos (C’s) votaron en contra de este punto en el pleno, sumando nueve votos. Coincidieron al argumentar que todavía no se habían presentado las cuentas de la sociedad pública de Emvismesa, de la que es responsable el popular Hassan Driss.
Por este motivo, CpM propuso que las cuentas del año pasado se quedasen sobre la mesa, pendientes de un informe y de aprobarse, hasta tener también las cuentas que faltan. La iniciativa contó con el apoyo del PSOE, pero no con el respaldo del resto de las formaciones, que votaron en contra.
El diputado Hassan Mohatar (CpM), del principal partido de la oposición en la Asamblea, criticó que si no se presentaba el balance de la sociedad pública de la vivienda era imposible saber qué se estaba aprobando. “Hacemos advertencia de legalidad”, reiteró el cepemista, quien recordó que la propia Intervención de la Ciudad ha presentado “reparos” en otras ocasiones y también por culpa de Emvismesa, que tampoco presentaba sus cuentas.
Por su parte, la secretaria general del PSOE en Melilla, Gloria Rojas, antes de que las cuentas fuesen aprobadas por mayoría de PP y PPL, reclamó a los diputados del Gobierno local que, aunque nunca hagan caso a las recomendaciones que hacen los partidos de la oposición, sí tengan en cuenta las advertencias que en años anteriores les ha transmitido el Tribunal de Cuentas por presentarlas incompletas.
“Debería importarles lo que dice este organismo, que en varios informes ha instado a la Ciudad a presentar sus cuentas completas, incluyendo las de todas las sociedades públicas”, manifestó.
Rojas criticó que el Ejecutivo local caiga siempre en los mismos errores puesto que, según incidió, la sociedad de Emvismesa lleva años sin rendir sus cuentas en tiempo y en forma.
Por su parte, el diputado Eduardo De Castro, de C’s Melilla, denunció en el pleno que, “como siempre”, se presentan las cuentas “tarde e incompletas”, cuando lo más correcto sería hacer caso a las recomendaciones del Tribunal de Cuentas. Sin embargo, el partido naranja decidió votar en contra de la proposición de CpM porque entiende que las cuentas no pueden quedarse sin presentar.
El consejero de Economía, Daniel Conesa, que ejerció como portavoz del Ejecutivo local en el pleno, tildó de “disparate” el argumento de la oposición para no aprobar la Cuenta General de 2017. “No pueden quedarse sin presentar porque falten las cuentas de una sociedad, que supone una pequeña parte del conjunto”, sostuvo.
Según alegó, se ha trasladado al Tribunal de Cuentas esta circunstancia y el propio organismo le ha recomendado que presenten el balance de 2017, aunque falten las cuentas de Emvismesa, que serán presentadas en cuanto estén, según indicó Conesa.
Afirmó que la aprobación de las mismas era el último paso que había que dar después de que se haya saldado el plazo de 23 días en el que los ciudadanos podían presentar alegaciones, sin que se hayan recogido observaciones.
Según reiteró el consejero, las cuentas de la sociedad pública de la vivienda son “un pequeño lunar negro”, porque son “solo una pequeña parte del conjunto total de las cuentas”. Finalmente, las cuentas fueron aprobadas con los doce votos a favor de los diputados del Gobierno local, del PP y el Grupo Mixto.
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