La adicción a las drogas, la gran condena de una persona

El director de Proyecto Hombre en Málaga indica que esta ONG atendió en 2012 a 1.260 penados en Andalucía l El 21% de los presos reconoce que consume cannabis en la cárcel.

“Una pena impuesta por un juez se acaba cumpliendo por muy difícil y larga que sea, pero la gran condena que tiene una persona que llega a Proyecto Hombre es con él mismo, es con su problema de adicción”. De esta forma describió el director de Proyecto Hombre de Málaga, Juan José Soriano, la importancia que tiene la colaboración de  esta ONG con las instituciones penitenciarias. Ayer participó en el curso ‘Alternativas a la prisión y asistencia a los penados’ que se está desarrollando en el Campus de la UGR de Melilla.
Soriano explicó que es igual de difícil ayudar a desengancharse de las drogas a una persona que está fuera de la prisión o a una que está dentro. Aseguró que Proyecto Hombre no se limita a tratar el tema de la drogadicción, pues eso sólo ayudaría a la persona a que durante unos meses o años tuviera periodos de abstinencia. Afirmó que el trabajo de esta entidad va más allá. Para esta ONG, el problema de adicción es un factor más de la vida de una persona a la que hay que tratar en su conjunto. Incluso indicó que la pena que imponga un juez también se aborda como otro elemento más que condiciona la vida de este condenado, pero no como ‘el problema’.
El director de Proyecto Hombre en Málaga indicó que hay suficientes medios en los centros penitenciarios como para que los presos puedan acceder a programas para dejar las drogas. Explicó que uno de los datos curiosos de un estudio publicado por la Administración Penitenciaria es que los presos prefieren someterse a tratamientos de deshabituación, hasta un 95%, en vez de utilizar otros procesos en los que se pueden sustituir las drogas por medicamentos, como es el caso de la metadona.

La intervención de esta ONG
Proyecto Hombre atendió a 1.260 personas en toda Andalucía que fueron derivadas a esta institución desde los centros penitenciarios o los juzgados. Se trata de un volumen bastante alto, tal y como afirmó Soriano. Por ello, aseguró que respalda la idea que esta entidad debe continuar trabajando con la Administración Penitenciaria.
Soriano explicó que según unas estadísticas estatales el 21% de los presos reconoce consumir cannabis dentro de prisión, un 4% toma bebidas alcohólicas y un 3% heroína. Apuntó que esto datos, aunque más bajos que los de 2006, son alarmantes, pues se supone que en los centros penitenciarios no se tiene acceso a las drogas. No obstante, resaltó “la valentía” de la Administración por “dar luz a esta realidad”. Añadió que esto permite poner solución a un problema que existe y que no se puede ocultar.
El presidente de Proyecto Hombre de Málaga señaló que es un fracaso del Estado que los presos tengan acceso a las drogas dentro de las cárceles. Pero insistió en que la única forma de abordar este problema es hacerlo público y buscar una solución entre toda la sociedad.
Por otro lado, indicó que en este estudio también se revelaba que el 25% de los presos se habían iniciado en el consumo de drogas al entrar en la prisión. Aunque añadió que en la mayoría de los casos eran penados con alta prevalencia a caer en este mundo debido a los numerosos problemas sociales que tienen fuera de la cárcel.

La ONG en Melilla
Proyecto Hombre en Melilla atiende a varios penados que están en tratamiento para dejar las drogas. Soriano explicó que en la ciudad se cuenta con varios profesionales que atienden a estas personas fuera del centro penitenciario. Aseguró que para poder ofrecer este servicio dentro, necesitarían más recursos económicos.

Unidos
Los dos cursos. El director del 061 de Granada, Eladio Gil, ofrecerá hoy un curso sobre desfibriladores semiautomáticos en el Centro Penitenciario de Melilla. De esta forma, los dos cursos que se están impartiendo en el Campus estarán unidos gracias a esta iniciativa.
4%
Consume alcohol. El director de Proyecto Hombre en Málaga destaca la importancia de contar con esta ONG para hacer frente al consumo de drogas que hay en los centros penitenciarios españoles.
Charlas
Para cerrar el curso. El juez de Vigilancia Penitenciaria y coordinador de estas jornadas, Juan Rafael Benítez Yébenes, ofrecerá hoy una conferencia sobre ‘La libertad condicional como instrumento de reinserción social. La liberación de un preso en Semana Santa’.