El joven portero canario llega procedente del Talavera para pelearle el arco a Dani Barrio. Es un meta técnico con buen juego de pies l Se formó durante cinco años en la cantera del Espanyol.
José Pereira Betancort (10/05/94) es uno de los flamantes fichajes de la nueva U.D. Melilla. El guardameta canario, que destaca por su altura, juventud y habilidades técnicas, cuenta con una gran proyección en el fútbol español.
El nuevo portero unionista reconoció que le costó poco decidirse a la hora de venir a Melilla. “Ya sabía desde hace tiempo del interés de la Unión Deportiva. Cuando ves que un equipo se interesa por ti, al final el sentimiento es recíproco. Cuando escuché sobre el proyecto, poco más tenía que pensar, el acuerdo se firmó bien rápido”, relató.
Dura competencia
Ahora, llega a la ciudad autónoma con la intención de ponerle las cosas difíciles a Dani Barrio. “Nadie que abandona su casa para ir tan lejos lo hace para estar sentado en el banquillo. He venido a Melilla a jugar y auguro una bonita lucha por la portería esta temporada. Al final es como todo en esta vida, quien esté mejor va a salir al césped, y solo puede haber un beneficiado de esta competitividad: la U.D. Melilla”.
Es un portero atrevido en el juego aéreo, con carácter -pese a ser tan joven- y con un muy buen juego de pies. “Prefiero sacar el balón jugado a meter un pelotazo”, declaró el jugador azulino. Ya desde su adolescencia sobresalió en su primer equipo, la UD Lanzarote, lo que despertó la atención de clubes de primera como el Betis o el Espanyol.
Al final, Betancort hizo las maletas rumbo a Barcelona, tras aceptar una oferta proveniente de las categorías inferiores del conjunto perico. “Comencé muy joven en mi tierra, y de ahí se interesó por mi el Espanyol, club del que guardo un gran cariño. Allí pase cinco grandes años, que al final se estropearon por una lesión inoportuna”, asegura el guardameta.
Experiencia perica
Con el equipo perico de la División de Honor de Juveniles consiguió ganar una liga a su rival más acérrimo, el F.C. Barcelona. De ahí, Betancort dio saltó al filial del Espanyol, donde su progresión se vio algo frenada al competir por el arco con Pau López, actual dueño de la meta blanquiazul en la Liga BBVA. Una desafortunada fractura en un dedo del pie le impidió, además, competir con él en igualdad de condiciones.
Pese a todo, el talento de este corpulento portero (1,89m de altura) atrajo la atención del Burgos, club donde recaló media temporada y con el que debutó en la 2ª División B. La temporada siguiente acabaría en el filial del Alcorcón, donde admite que “se forjó futbolísticamente”.
“Pese a jugar en el Alcorcón B en Tercera, fue un año muy productivo para mi. Disputé 36 encuentros y no logramos clasificarnos para la liguilla de ascenso por el goalaverage. Tuvimos mucha mala suerte, pero aquel año aprendí mucho. Estuve prácticamente toda la liga entrenando como tercer portero del primer equipo, que jugaba en Segunda”, relata Betancort.
Al meta canario se le quedó la Tercera chica. El Talavera de la Reina apostó por él para luchar por el puesto de portero titular con Bernabé, de mayor experiencia en la categoría. “Este año pasado me ha curtido mucho profesionalmente, ha sido muy ilusionante y, aunque personalmente acabé jugando, el descenso de categoría lo echó todo a perder”, contó Betancort.
Ilusionado y con ganas
Ahora, dice estar preparado para conseguir “todo lo posible” con el conjunto unionista. Comenta que ha ido siguiendo la trayectoria de la U.D. y del Grupo Cuarto, y aunque la considera una competición muy complicada, espera “hacer cosas grandes”. “Este año han ascendido tres de los cuatro equipos que disputaron la liguilla de ascenso a Segunda, eso habla del nivel de la categoría, pero si seguimos la línea de la segunda mitad del año pasado, seguro vamos a quedar lo más alto posible”, añadió.
Betancort, antes de decidirse, habló con varios ex compañeros que habían jugado en Melilla, y reconoce que le hablaron muy bien, tanto de la entidad azulina como de la ciudad autónoma. “Estoy impaciente por comenzar; tanto deportiva como personalmente va a ser toda una experiencia para mi”.
En cuanto al cambio de entrenadores que se ha producido en la U.D. Melilla por los problemas personales de Granero, Betancort asegura que “no es algo que le afecte profesionalmente”. Considera que el nuevo inquilino del banquillo unionista está muy capacitado para hacer grandes cosas con este club y que, “por seguro”, tendrá ambiciones “iguales como mínimo” a las del preparador valenciano.
Recomendaciones positivas
Reconoce que ha podido hablar en estos días con el ex entrenador azulino, al que le deseó telefónicamente “que mejore lo antes posible” su situación familiar. “Al final, estas son las cosas del fútbol. Yo hablé con Carlos para venir, pero sucede algo así y todo cambia. Y no pasa nada, llega uno con las mismas ilusiones para demostrarle al nuevo míster que puede contar con él”, comentó el meta canario.
