A poco más de un mes y medio para la Navidad, El Faro ha salido al mercado para comprobar cómo están los precios de los productos más típicos de estas fechas. La inflación se está dejando notar en mantecados y turrones, además de en mariscos como las cigalas, en las que se prevé un aumento de precio de hasta el 30% próximo a las fiestas. Ante este panorama las navidades se presentan más caras de lo normal.
La próxima Navidad viene marcada más que nunca por un aumento significativo de los precios a causa de la inflación. Uno de los productos protagonista en las mesas de los melillenses y que más dispara su coste es el marisco. En una pescadería del mercado, su propietario Jaime recalcó a El Faro que recomienda que los melillenses comiencen ya a hacer sus compras navideñas.
Por ahora, dijo, las gambas están a un precio normal y los langostinos rondan los 25-50 euros el kilo, según su tamaño. Estos mismos productos pueden llegar a subir un 20% o un 30%. "El mes de noviembre es tiempo para ir preparando ya la compra de Navidad", advirtió.
Los precios, señaló, aunque están más altos que otros años se prevé que suban mucho más los días previos a Nochebuena. En torno a casi un 30% más en mariscos como las cigalas frescas. El kilo ahora cuesta 50 euros, pero puede alcanzar los 60 o 70 euros. Este pescadero apuntó a que el aumento de precios se debe a la subida del coste del transporte y los combustibles.
Con este panorama, Jaime hizo hincapié en que las ventas han bajado. Otros años, añadió, muchos melillenses tenían ya por estas fechas casi todo preparado.
"Las navidades se presentan malas", recalcó el pescadero. Con la frontera abierta, destacó que los fines de semana Melilla se queda vacía y muchas personas aprovechan para ir a Marruecos, ya que el coste de vida es mucho menor allí.
En otra pescadería, la de Abdelkader, avisan de que son los calamares los que están a precio prohibitivo y que esperan que sigan subiendo. Ahora mismo, señaló, el kilo de calamares está a 18 euros y espera que en unas semanas suba a 22 euros. Los calamares son, aseguró, uno de los productos que más se venden en Navidad, ya que sus clientes suelen comprarlos para rellenarlos en Nochebuena.
Otro de los pescados que más vende en estas fiestas es el rape, que ahora vale 12 euros y que subirá a 14 euros o el pulpo, que está a 10 euros el kilo. A pesar de que no es un aumento significativo, sí que se nota en el bolsillo en la suma total de la compra.
Lo que sí aseguró Abdelkader es que los mejillones mantendrán su precio.
Ante estas previsiones, en el mercado no hay buenas expectativas de ventas. Ismael tiene una tienda de ultramarinos y vaticina que ante tanta subida, los melillenses recortarán en la cesta de la compra de Navidad. Sobre todo en turrones o mantecados. Debido a al aumento de los costes de producción y de las materias primas como las almendras o el aceite, esenciales para este tipo de dulces navideños, los fabricantes tendrán que venderlos más caros. "Todo lo que tiene que ver con los dulces de Navidad ha subido", resaltó Ismael.
El comerciante explicó a este diario que si el año pasado vendió el kilo de mantecados a seis euros, este año tendrá que venderlos de ocho a diez euros. "La Navidad se va a poner muy cara", aseguró Ismael, que estima que durante las navidades de este año los melillenses consuman menos dulces.
Pero no solo los artículos navideños están por las nubes. Para Ismael lo que más ha subido y menos beneficios le aporta son los huevos. La caja la vende ahora a más de cinco euros cuando hace unos meses apenas superaba los tres euros. "Es una exageración, en un mes ha subido cuatro veces", señaló este comerciante, para añadir que el papel higiénico está a precio de oro.
Ismael se quejó de que antes subían los precios de año en año y ahora, lo hacen semanalmente. Este aumento, dijo, está perjudicando especialmente al pequeño comercio. "No se puede trabajar, invertimos más y ganamos lo mismo", subrayó.
Asimismo, hay otros factores que perjudican también a otro tipo de tiendas. Hablamos de la venta de jamones, otro de los productos típicos en las mesas durante Navidad.
En 'La bodega de Boris', el mismo propietario explicó a El Faro que la venta de jamones aún no ha despegado. Hace mucho calor y todavía considera que es demasiado pronto para empezar con las compras de Navidad. "Hasta que no pase el puente de diciembre no se anima más la cosa", explicó.
El empresario aseguró a este diario que el precio de los jamones no ha aumentado este año, pero que sí lo han hecho otros embutidos como el chorizo ibérico, lomo o salchichón sí que ha subido un poco.
Con toda esta situación, las compras navideñas no se han adelantado este año. A pesar de que se esperan unas fiestas más caras de lo normal, melillenses no han comenzado a hacer sus compras para la cena de Nochebuena o la comida de Navidad. La mayoría de encuestados aseguran que no dejarán de comprar ciertos productos aunque sí disminuirán la cantidad.
"No voy a comprar todavía las cosas de la Navidad", aseguró María Inés. Esta alicantina, afincada en Melilla, se queja de que todo está por las nubes y se resigna a que los precios sigan subiendo. El pescado para ella es lo que está más caro en relación a otros años aunque afirma que es un aumento generalizado.
Aún así no adelantará las compras navideñas. En su opinión no merece la pena hacerlo con tanta antelación porque considera que el pescado que hay en la ciudad no es de muy buena calidad. María Inés no cambiará el menú de Nochebuena de todas maneras. En su mesa tienen costumbre de poner un cocido con pelotas, típico de su zona.
"Subir ha subido todo", confirmaba otra melillense, Antonia, que destacó que en los supermercados se ha notado mucho más la subida que en en el mercado.
En las grandes superficies, comentó, ha subido todo más de 30 céntimos. Si hay un elemento que tiene que destacar es la arena de gato. "Ha subido 80 céntimos", aseguró. Su hija tiene tres gatos y compraba la arena a 4 euros, ahora, afirmó, lo hace a 4,80 euros. "Le he dicho que coja arena de la playa", bromeó.
Este año, Antonia tendrá que recortar en la lista de la compra como bien destacaron los comerciantes. Esta melillense explicó que comprará poca cantidad de cada producto, unos pocos mantecados, otros pocos bombones y así con todos los dulces navideños.
"Es una diferencia de precio muy importante", destacó también Miguel, otro encuestado por El Faro. Él suele encargarse de hacer la compra en su casa y ha visto cómo los precios están al laza.
Para él la solución a este problema no es comprar menos o dejar de comprar sino "plantearnos cómo pagar menos impuestos para que los precios no sean tan caros".
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