Tras las fiestas de Navidad, Melilla vuelve esta semana a la Fase 3 con restricciones horarias y de aforo en el sector comercial. La medida que más afecta a la mayoría de negocios de la ciudad es la limitación horaria que pasa a tener como hora de cierre las 19:00 horas de la tarde. Esto implica menos horario de público y de ventas en un sector que sufre las consecuencias económicas de la crisis sanitaria derivada por la pandemia de la COVID-19.
Por un lado, hay conformidad al tratarse de una medida que se toma por el empeoramiento de la situación con el aumento de contagios, pero por otro hay mucha incomprensión ya que la hora punta para el comercio suele ser entre las 19:00 y las 20:30 horas. "Precisamente a esa hora tenemos que cerrar y nos limita un poco", comentaba el presidente de la Confederación de Empresarios de Melilla (CEME-CEOE), en declaraciones a El Faro.
Reconoció que es una medida que hay que aceptar y que se trata de una situación que también sucede a nivel nacional, pero aseveró que se trata de "una piedra más en el camino" desde que comenzó todo en marzo de 2020. "Aguantaremos como podamos", afirmó. El consejero de Economía y Políticas Sociales responsable también del área de Salud Pública, llamó al presidente de la CEME-CEOE para anunciarles la decisión adoptada antes de hacerse pública, y en esa conversación Alcoba intentó ver la posibilidad de que el horario de cierre fuese a las 20:00 horas.
Consideró que hasta las 22:00 horas que es el momento en el que empieza el toque de queda, queda un periodo de tiempo en el que está permitida la circulación de personas en las calles. "Entendemos que a lo mejor hasta las ocho de la tarde hubiese sido más razonable", indicó, asumiendo que en las próximas dos semanas se mantendrá así y por ello habrá que ver cómo se desarrolla la situación.
Por otro lado, El Faro también ha contactado con Javier Alarcón, el presidente de la Asociación de Comerciantes y Profesionales de la Zona Centro, quien expone también que la decisión deja mucha incomprensión en el sector. "Porque no se entiende", afirmó. Explicó que es comprensible que se trate de una decisión derivada por el aumento de contagios, pero le resulta una incoherencia que otros establecimientos, como los supermercados, cierren más tarde y se encuentren llenos "hasta la bandera", mientras que son las tiendas pequeñas "en las que se cumplen las normas de aforos y no entra nadie" tengan que cerrar.
Se preguntó quién asesorará al consejero responsable de Salud Pública y señaló que debería también consultar estas decisiones a representantes de los miembros del sector del comercio ya sea la propia Confederación de Empresarios como las asociaciones de comerciantes para conocer cómo les afectaría.
Además, Alarcón indicó que acaba de pasar la campaña de Navidad y que esta ha sido complicada para el comercio porque "ha ido bastante peor que el año pasado". Con la campaña de rebajas esperaban completar un poco las cuentas, pero aseguró que el hecho de que les obliguen a echar el cierre a las 19:00 horas les "ha machacado totalmente". "Es el hundimiento del consumo del comercio, es ya lo que faltaba", expresó.
El propietario de La Librería, Fran Álvarez explicó que es cierto que afectan estas medidas a los comercios, pero comentó que si todo esto "sirve para que haya más responsabilidad y para evitar que haya una tercera ola, solo ha que esforzarse entre todos". Un esfuerzo, según explicó que vendría por parte de los comerciantes a la hora de sacrificar esa ultima hora de la tarde, y por parte de los clientes, para adelantar un poco sus compras antes del cierre de los establecimientos.
Pero otros como Madina Yafrani, que es autónoma en ItStyle, consideran que es "una medida desproporcionada". Esta empresaria señaló que el aumento de contagios era previsible y que había ejemplos de otras Comunidades Autónomas para que esto no sucediese a esta velocidad. Está indignada con la decisión de Salud Pública, ya que considera que es un castigo para los autónomos y que las consecuencias que todo va a traer son "palos" a los autónomos y más paro. Cree que tendrían que haberse tomado medidas y afeó que se haya permitido la celebración de bodas de hasta 50 personas en estas fiestas.
Manuel Hernando, propietario de Elisia Discos, expuso también su incomprensión por esta medida y recordó también que cuando la situación epidemiológica era peor, el horario de cierre era a las 20:00 horas. Entiende, al igual que también lo expresó así Yafrani, que la exposición al virus es la misma ya sea a las cuatro que a las ocho de la tarde. "Es absurdo", concluyó Hernando.
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