Juan José Imbroda, presidente del PP de Melilla y ganador de las elecciones de este domingo 28 de mayo ha asegurado este lunes que "hemos inaugurado un nuevo tiempo en Melilla", porque aquí "se acabó la historia del voto por correo". En una rueda de prensa, aún con la resaca de la celebración de los 14 diputados que le dan la mayoría absoluta en la Asamblea de Melilla, Imbroda ha prometido hacer una auditoría en cuanto forme Gobierno y limpiar de tics, eslóganes y mensajes endiablados, la vida política de la ciudad. "Se acabó lo de vota al hermano, no votes al aromi", insistió el presidente popular en una comparecencia en la que felicitó a la Policía Nacional y la Policía Local por el trabajo realizado este domingo, que dio al traste con cualquier intento de adulterar las elecciones en la ciudad y permitió a los melillenses "votar en libertad". "Aquí se ha acabado. Por supuesto habría que modificar la LOREG para avanzar en libertad y democracia", pero Imbroda cree que las decisiones de las Juntas Electorales de Zona y Central podrán aplicarse de igual forma al voto por correo en las elecciones generales de julio próximo. Según sus cálculos, la Ley Orgánica Electoral no podrá modificarse hasta el primer trimestre del 2024, pero se hará, prometió. Por otro lado, a Imbroda no le sorprende el anuncio de Mustafa Aberchán de impugnar las elecciones porque eso, en su opinión, es un clásico y al hacerlo, bromeó, da tiempo a su equipo en el Gobierno a cobrar la paga extraordinaria de verano. En este sentido, mandó un mensaje de confianza al electorado aclarándole que independientemente de cuándo se forme el Gobierno, su equipo empezará a trabajar ya porque cuando "gana el PP, gana Melilla". En cualquier caso, el presidente del PP de Melilla aprovechó para dar las gracias a todos los melillenses que han votado PP y que representan casi el 53% del censo electoral. "Los resultados han sido avasalladores", dijo en referencia a que su partido ha subido casi 15 puntos y todavía faltan por contabilizar los casi 6.000 votos del censo CERA, que reúne el voto de melillenses en el extranjero y el confía en conseguir los 170 apoyos que le faltan para conseguir el diputado número 15. Al respecto quiso destacar que su partido ha ganado en casi todas las mesas electorales, incluidas algunas de los colegios Juan Caro y León Solá, tradicionales feudos de Coalición por Melilla, aunque lamentó que la abstención haya sido tan alta, fundamentalmente debido a que el 21,21% del censo electoral pidió votar a distancia y unos 6.000 de esos sufragios no llegaron a depositarse en Correos por lo que se desviaron a la abstención. Preguntado por El Faro sobre qué compromisos adquiría con estos distritos para frenar la emigración de jóvenes sin trabajo, Imbroda se centró en hablar de las acusaciones de racismo vertidas contra él y su partido durante la campaña electoral. "Eso no lo vamos a perdonar ni permitir", advirtió, haciendo hincapié en que ese discurso "hace daño a todos y abre un foso enrome entre dos colectivos" y por eso prometió acabar con eso. El presidente popular no quiere oír hablar de racismo y destacó que en la celebración de la victoria del PP, frente a su sede, más de la mitad eran musulmanes y acusó a CpM (sin nombrar al partido de Mustafa Aberchán) de engañar a muchos jóvenes y hacer "esclavos económicos e intelectuales". En este punto aprovechó para pedir a los periodistas que sean "beligerantes" o, de lo contrario, "Melilla se va a hacer puñetas como pueblo". Como partido popular, Imbroda insistió en que se siente damnificado por la trama del voto por correo porque de no haber existido, en 2019 no habría perdido el Gobierno de Melilla.
Las elecciones generales
Preguntado por cómo afronta el anuncio de Pedro Sánchez de convocar elecciones generales para julio, Juan José Imbroda quitó hierro al asunto y centró su discurso en destacar que es bueno para Melilla que haya un gobierno del PP en la ciudad y también en Madrid porque Feijóo conoce la "complejidad estratégica" que tiene nuestra ciudad. En este sentido, mostró tranquilidad con la convocatoria de elecciones generales porque, según dijo, su equipo tiene la maquinaria en marcha y viene mejor que sea ahora en verano y no después del parón de las vacaciones. En Melilla, concluyó, "hace falta una mano sensata" y aunque no sabe cómo se encontrará las arcas públicas en el ayuntamiento, se mostró satisfecho con haber podido parar 40 contratos a dedo y haber ahorrado 1,6 millones de euros. "Ahora, insistió, "vienen cuatro años de cambio por delante" y ese cambio promete hacerlo con sensatez y cordura para dar estabilidad al Gobierno y marcar un nuevo rumbo a la ciudad. "Hay que levantar la economía. Hay que crear empleo estable y hay que limpiar", concluyó vaticinando que el final de este año será fabuloso para la ciudad.