El Balonmano Virgen de la Victoria de Melilla juega este sábado a las 18:00 horas en el Lázaro Fernández frente al Balonmano Pinto. Partido correspondiente a la vigésimo tercera jornada de liga del Grupo F de la Primera División Nacional de Balonmano.
Importante encuentro para los melillenses que se juegan seguir entre los cuatro primeros a falta de sólo ocho jornadas para el final de la competición. Cada vez los partidos son más igualados y cada vez hay menos margen de error para intentar cerrar la mejor temporada en la historia del club.
Los guerreros necesitan hacer del Lázaro Fernández su fortín y por eso hacen un llamamiento especial a la afición para que acuda en masa a apoyar a su equipo en este trascendental encuentro. No sólo para que el aliento del público empuje a los azulinos hacia la victoria, también porque es un partido solidario en el que se van a recoger alimentos no perecederos para el Banco de Alimentos de Melilla, que necesita, especialmente, leche entera para abastecer a las familias con más necesidades.
Melilla llega a este importante encuentro con serias dudas, principalmente en la primera línea. El mayor referente en ataque del equipo, el lateral Nailson Amaral, tiene molestias en una rodilla, no ha podido entrenarse esta semana, todo apunta a que no podrá jugar este encuentro e incluso podría perderse alguno más si continúa la inflamación en la articulación.
También es duda Edu Pavo, jugador polivalente que puede actuar de central y lateral, que tampoco se ha podido entrenar debido a molestias físicas.
La corta plantilla melillista se ve muy resentida para este encuentro y deberá completarse con jugadores juveniles.
Por su parte los madrileños no están atravesando pro su mejor momento. Empezaron bien la temporada pero han ido perdiendo fuelle y se sitúan en décima posición con 14 puntos. A pesar de eso es un equipo fuerte y compensado. El bloque principal lleva años juntos jugando, se conocen bien y saben practicar un buen balonmano. Son muy ofensivos y suelen meter muchos goles y pelear los partidos hasta el final.
Los de Pablo Torres tienen claro que tienen que ser contundentes en defensa y no dejar que Pinto salga al contraataque. Si Bruno Santana impone su clásico ritmo lento pero seguro y no baja la efectividad en ataque, a pesar de la falta de Amaral, Melilla no debería tener problemas para sumar dos puntos más que les acercarían a los tres primeros y le alejarían de sus inmediatos perseguidores.
Los guerreros quieren la victoria y quieren ayudar lo máximo posible al Banco de Alimentos. Ahora les toca a los aficionados responder a la llamada y demostrar su solidaridad y su amor por el balonmano.
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