La Guardia Civil detuvo a tres personas que introducían droga en Melilla lanzándola a través del vallado fronterizo. Los hechos ocurrieron el pasado día 6, sobre las 16:45 horas en las inmediaciones del Control Fronterizo de Barrio Chino.
El modus operandi de este grupo organizado era el de utilizar a un menor de edad en primera línea para recepcionar y buscar los paquetes de droga lanzados a través del vallado perimetral.
Una vez recogido los paquetes, el menor se dirigía al vehículo estacionado en una zona próxima al lugar de la recepción y entregaba la droga a los ocupantes.
Establecido dispositivo de vigilancia, el agente de la Guardia Civil, apoyado por prismáticos oficiales, observó como el menor se bajaba de un vehículo marca Volkswagen color gris y a la carrera se acercaba a una zona abundante en matorrales y arboledas, muy próxima al control fronterizo de Barrio Chino. Mientras el vehículo se marcha a baja velocidad para retornar en escasos minutos al lugar donde se apeó el menor.
Fue entonces cuando el agente se acercó a la zona donde el menor se encaminó, así como un coche patrulla oficial se dirigió hacia el vehículo que esperaba al menor, y de esta forma evitar su posible fuga. Al percatarse de la presencia policial, el menor se agachó entre la vegetación intentando eludir a los agentes. Una vez localizado, se encontró bajo su cuerpo dos paquetes de al parecer una sustancia estupefaciente, que por su olor, color y textura podría tratarse de hachís.
“Sin solución de continuidad, los agentes procedieron a dar el alto al vehículo que esperaba al menor identificando a dos hombres mayores de edad”, se informó en una nota de prensa.
Los dos adultos y el menor fueron detenidos como supuestos autores de un delito contra la salud pública en su modalidad de tráfico de drogas
Además, se procedió al pesaje de la droga intervenida que alcanzó un peso de dos kilogramos. Con esta actuación la Guardia Civil evitó la distribución y comercialización en el mercado ilícito de “ocho mil doscientas dosis” de este tipo de estupefaciente.
Los detenidos son dos jóvenes mayores de edad, uno de nacionalidad española y otro de origen marroquí, de 23 y 27 años de edad respectivamente. Ambos pasaron a disposición judicial. El menor de edad es residente en el Centro de Educativo de Estancia de la Purísima y pasó a disposición de la Fiscalía de Menores de nuestra ciudad, añadió la Comandancia.
“La participación del menor es el de colaborador necesario al ser utilizado para la recepción de la droga a cambio de la promesa del pago de la cantidad de 100 euros por coger la droga y entregársela a los adultos”, concluyó.
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