Tras la finalización de la Semana Santa de Melilla 2023, con el broche de oro final del Domingo de Resurrección bajo la mirada de miles de personas que no quisieron perderse la estación de penitencia de Jesús Resucitado y la Virgen María Santísima del Rocío, se cierra una de las Semana Santas con más afluencia de melillenses en estos últimos años.
Tanto ha sido así, que el presidente de la Agrupación de las Cofradías de Melilla y el Hermano Mayor de la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Cautivo de Medinaceli y María Santísima del Rocío, Gregorio Castillo, asegura que "esta Semana Santa ha sido la mejor de los últimos años".
A falta de la reunión oficial entre las seis cofradía de Melilla que conformar la Agrupación de la ciudad, Castillo asegura que ha sido "una Semana Santa fantástica donde se han cumplido todos los objetivos proyectados para este año".
Asimismo, un aspecto fundamental que ha querido destacar el presidente ha sido la gran participación de los melillenses para que ningún paso se quedará sin salir este año. "Hemos tenido una gran acogida, tanto en los melillenses que han querido participar en la estación de penitencia, donde se han llenado todas las vacantes de portadores de todos los tronos, como la respuesta de la ciudadanía en las calles", recalca Castillo.
“Concretamente cuando encerramos nuestros sagrados titulares el Jueves Santo fue un momento único y especial”, resalta.
En la misma línea se encuentra Carlos Rubiales, segundo Hermano Mayor y albacea de culto de La Cofradía Castrense de Nuestro Padre Jesús Humillado y María Santísima de la Piedad, que asegura que "la Semana Santa de este año ha sido una de los mejores con diferencia".
"No únicamente hemos tenido la suerte de tener a todas las Cofradías en la calle sino que las calles han estado llenas de melillenses que han arropado a cada procesión, ha sido una Semana Santa muy completa en todos los aspectos desde el Domingo de Ramos hasta el Domingo de Resurrección, gracias también al gran tiempo que se ha registrado durante todos los días", subraya Rubiales.
De esta forma, el Hermano Mayor del Humillado explica que uno de los principales motivos por la gran respuesta de los melillenses ha sido la vuelta definitiva a la normalidad tras las restricciones que seguían existiendo el año pasado. Asimismo, Rubiales confiesa a El Faro que gracias a todo esto, la ilusión de los melillenses por la Semana Santa ha sido mayor que incluso antes de que comenzara la pandemia.
"Esa gran ilusión que se ha reflejado en los melillenses ha sido un punto clave para que la Semana Santa de Melilla luzca como tiene que hacerlo siempre", insiste Rubiales.
En algunas regiones de nuestro país, en el Sábado Santo también se realizan estaciones de penitencia al igual que en el resto de días de la Semana Santa, en cambio en Melilla y en una de las comunidades donde se celebra la Semana Santa con mayor fervor y devoción como Andalucía no se lleva a cabo ninguna procesión por las calles y según confirma Gregorio Castillo, la Semana Santa de Melilla lleva estructurada así desde siempre y no saldrá ninguna procesión en el Sábado Santo durante los próximos años, salvo "giro radical inesperado".
De esta forma, Castillo cuenta como tras la representación de la muerte de Jesús en el Viernes Santo, lo único que se hace durante el Sábado Santo es acompañar a la Virgen en su dolor tras la pérdida de su hijo, con oraciones y rezos en las parroquias de la ciudad, a la espera de la resurrección de Jesucristo con la vigilia pascual.
Esta vigilia pascual, según explica es uno de los "actos más importantes" que se celebra en la noche del Sábado Santo al Domingo de Resurrección para recibir de nuevo al Señor resucitado.
"Así lo tenemos planteado desde hace muchísimos años y creo que la Semana Santa en Melilla siempre ha sido muy completa en todos los sentidos", resalta Castillo.
Otro aspecto fundamental que se ha querido tratar con los máximos responsables de las distintas Cofradías de la ciudad ha sido los cambios que les gustaría introducir en la Semana Santa de Melilla del próximo año, donde Carlos Rubiales lo tiene muy claro al respecto: "Se debería recuperar el capirote en los nazarenos y que todos los nazarenos llevasen capirote porque es un símbolo esencial que refleja de la Semana Santa", resalta.
Asimismo, Rubiales insiste en que es muy importante el compromiso de los portadores para que no se quede ningún trono sin salir por falta de mujeres y hombres de trono como si ha ocurrido en algunas ocasiones, además de ir perfeccionando algunos detalles para mejorar cada año un poco más.
En cambio, Castillo asegura que aunque siempre haya cosas que mejorar y pulir cada año, Melilla tiene su propia Semana Santa y no tiene que copiar ni inspirarse en ninguna de otra ciudad porque la Semana Santa que tiene Melilla es la que las Cofradías de la ciudad han querido tener desde siempre.
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