La inmensa mayoría de los transfronterizos que trabajan en Melilla no podrán entrar en la ciudad hasta que no arranque la segunda fase de apertura de las fronteras. Así lo ha dicho el presidente de la CEME, Enrique Alcoba, después de la reunión mantenida el miércoles con la delegada del Gobierno, Sabrina Moh. De los cerca de 1950 trabajadores transfronterizos que existen en la ciudad, solo 92 cuentan actualmente con la documentación en vigor para poder pasar la frontera en la primera fase, que se abrirá previsiblemente el próximo día 1 de mayo. De esos 1950 trabajadores, 1600 corresponden a las empleadas de hogar. Los casi 400 restantes están inscritos en otros sectores como la construcción, la hostelería y la panadería, fundamentalmente. Durante la reunión del miércoles, la delegada, efectivamente, transmitió a sus interlocutores de la CEME que la fecha que se baraja para empezar la primera fase de la apertura de la frontera es el 1 de mayo y solo por el puesto de Beni-Enzar ("de Farhana no sabemos nada", reconoció Alcoba"). Solo podrán cruzar, además, residentes en Melilla o la Unión Europea, marroquíes con visado y transfronterizos con documento en vigor. La segunda fase no tiene señalado el día pero es la que los empresarios esperan "más impacientes" porque se trataría ya de la Aduana Comercial. Lo que parece totalmente claro a juzgar por las palabras del presidente de la patronal melillense, es que Barrio Chino quedará cerrada de forma definitiva, al menos de momento. "Se puede dar por suprimido ese paso", comentó porque el comercio atípico queda completamente descartado en este "antes y después" de la frontera con Marruecos.
Buen camino
La reunión de la delegada sirvió también para que ésta les manifestara que las negociaciones entre España y Marruecos a tenor de la frontera "van por buen camino" y que se establecerá un control mucho más exhaustivo "que es lo que queremos todos". Alcoba insistió en que "hay que poner" orden en la frontera para que haya una "fluidez razonable" en el paso y apuntó que sí se ve necesario un "refuerzo policial". "Nosotros nos ponemos en el lugar de todos. Queremos una frontera segura, tranquila, que no haya saturación en el hospital pero eso no quita que se abra la frontera porque todo es beneficio si el paso es fluido".