El Gobierno sigue negociando con Marruecos el control de los flujos migratorios hacia España a través de Melilla y Ceuta, según manifestó este martes el director general de la Policía, Francisco Pardo, a preguntas de la senadora melillense Sofía Acedo en la Comisión de Interior de la Cámara Alta. La parlamentaria popular quería saber de qué manera se piensa controlar en el futuro las entradas a la ciudad por el puesto de Beni-Enzar, una vez se posibilite la llegada de los transfronterizos a partir del próximo día 31. En ese sentido, Acedo le recordó al director general que Melilla ha soportado hasta un 19% de inmigración, muy por encima de la media nacional e incluso europea como consecuencia de la imposibilidad de controlar las entradas por la excepcionalidad del Tratado de Schengen. Esa excepcionalidad ha permitido que los nadorenses pudieran acceder a la ciudad sin pasaporte, aunque les impedía pernoctar en Melilla. "Se trata de una medida que no ha tenido control, no porque los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad no quisieran hacerlo, sino porque resultaba imposible", precisó. De ahí que ahora la senadora del PP por Melilla quiera saber cuáles son las medidas que piensa llevar a cabo el Gobierno para ejercer ese control en las entradas a la ciudad a partir del 31 de este mes de mayo. La respuesta del director general, según Acedo, es que se sigue negociando con Marruecos.
Intervención
La intervención de la senadora se produjo justo al cumplirse un año del incidente migratorio en Ceuta. Y en ese sentido, preguntó al director general de la Policía por el dispositivo especial que ha diseñado su departamento para responder a la demanda que requiere la reapertura de dos pasos fronterizos. “¿En cuántos efectivos ha incrementado la Policía Nacional la plantilla de Ceuta y Melilla para hacer frente a este extremo sin tener que detraer policías de las unidades destinadas a las funciones de seguridad que requieren las dos ciudades autónomas?”. Sofía Acedo considera “desolador” comprobar que, en dos años de cierre, el Gobierno de Sánchez ha permanecido “de brazos cruzados” con pasos fronterizos que "no cumplen las condiciones de seguridad, sin los medios e infraestructura necesarios". Por ello, urgió al Ejecutivo a incrementar el número de efectivos de la Policía Nacional en las ciudades autónomas y a cumplir con la normativa de riesgos laborales para los agentes en los pasos fronterizos. En concreto, demandó una unidad especializada en fronteras en Melilla y Ceuta, con los complementos salariales que corresponde y un "protocolo claro de actuación" en los pasos, para evitar inseguridad jurídica.