En 2020, se fundó el Clúster de Emprendimiento de Melilla que, en la actualidad, integran 45 personas con edades comprendidas entre los 20 a los 50 años de edad: “Decidí fundar esta entidad porque creo que hay una falta de entendimiento por parte de la sociedad de que por ser Melilla somos menos. No somos menos y hay personas muy buenas en su campo en esta ciudad y están fuera trabajando. Hay una diáspora melillense que también se refleja en el resto de la península. Es muy importante que personas de Melilla o que tienen relación con la ciudad nos ofrezcan su visión de cómo se puede mejorar. Es decir que por su experiencia profesional nos puedan decir los errores y aciertos, y nosotros nutrirnos de ese conocimiento”, afirma Gabriel Ruiz, presidente del Clúster de Emprendedores de Melilla. Sobre las políticas del Gobierno de la Ciudad Autónoma donde la innovación es uno de sus ejes prioritarios, Ruiz opina que “no voy a decir al 100%, pero en una gran mayoría, muy por encima del 50%, nos nutrimos de la Casa Blanca. Todo lo que se mueve en la ciudad es Administración Pública ya sea Ciudad Autónoma, militares, educación o sanidad. Todo el dinero viene de ahí porque al final si tú tienes una librería, los clientes son personas que trabajan para la Administración. Entonces que el Gobierno entienda que tiene que haber nuevos modelos de negocio, que no estén directamente vinculados con la función pública es muy importante porque al final es la única forma, ya no de apartarlo, porque gracias a Dios tenemos una función pública muy fuerte en esta ciudad, que hace que en momentos de crisis en Melilla no se noten, pero sí es importante que se derive un poquito e intentemos buscar un caladero de mercado aparte”, subraya. Sobre si ha mantenido algún encuentro con el consejero de Economía, Miguel Marín, para abordar para poner en marcha algún proyecto en común, Ruiz nos comenta que: “Intentamos dejar la función pública un poquito al margen, pero en Melilla es imposible y al final siempre tienes relación, ya sea con el consejero directamente, con el presidente o con el director general, que es con el que más hablamos y ayudamos. Nosotros no recibimos nada, no tenemos ningún proyecto compartido con el Gobierno de la Ciudad, pero al final todas las acciones que lleve a cabo nosotros nos sumamos e intentamos ayudar lo que se pueda. Por ejemplo a las ferias que se celebren fuera irá alguien del Clúster para echar una mano. Con la UNED sí tenemos más apoyo porque no disponemos de presupuesto y la UNED nos ha querido “acompañar en esa parte” cediéndonos espacios para conferencias, por ejemplo”. Según un estudio dado a conocer por Oryon Universal, la radiografía del emprendedor español es un hombre de entre 35 y 44 años, formado y con experiencia previa en el sector. Una imagen que no corresponde con la del emprendedor en Melilla: “ El emprendedor en Melilla, que se entienda lo que digo, es el ‘tendero’ de Melilla porque al final el comercio transfronterizo siempre ha movido todo y ha sido el emprendedor, pero aquí, al final, nuestra función pública es tan grande que la gente siempre intenta acceder a ese mercado y estudiar unas oposiciones. Creo que el emprendedor nace, no se hace. Aquí el emprendedor no se hace por necesidad, pero aquí considero que la radiografía del emprendedor es más que le guste a una persona. Por ejemplo, desde pequeño, a mí siempre me ha gustado y he tenido una figura familiar en la que reflejarme”. Sobre si emprender en Melilla es complicado o no, Ruiz lo tiene claro: “Emprender un negocio o emprender en Melilla es más fácil porque conoces a todo el mundo. Lo dije una vez en una charla y se malinterpretó. Lo que quiero decir es que al final todo el mundo es amigo de todo el mundo y es fácil llegar. Aquí no es tan complejo hablar con un consejero. En esta ciudad se tiene acceso a mucha información que en otras ciudades no se tiene. Tú intentas emprender en Málaga y es muy difícil. En Melilla nos conocemos todos y siempre hay alguien que te echa una mano. Además disponemos de unos beneficios fiscales ventajosos, ya que no tenemos la presión fiscal de un peninsular. En Melilla pagamos la mitad de autónomo, pero, a cambio, tenemos una ciudad aislada y compleja, pero al mismo tiempo fácil porque tenemos acceso a muchas personas”. La pasada semana se inauguraba en la avenida Juan Carlos I un vivero de empresas, lo cual a Gabriel Ruiz le parece una gran idea: “Los coworking ya sean privados o públicos hacen falta porque no tenemos espacio, hay muchos profesionales que vienen para hacer algún tipo de negocio y los coworking son muy necesarios”. Creo que Melilla es una de las mejores ciudades de España para emprender. Respecto a en qué sector sería más fácil emprender, Gabriel Ruiz opina que “en Melilla es preciso cubrir muchas necesidades, así que es muy probable que si emprendes algo y lo trabajes te funciones. Pero Melilla tiene que conocerse más. Sólo salimos en los medios de comunicación cuando hay saltos a la valla, cuando hay problemas o cuando sucede algo malo y no conocen nuestro sistema fiscal. Por otra parte, contamos con unas buenas rutas aéreas. Nos quejamos de vicio. Pregúntale a alguien de Almería cómo tiene sus conexiones para llegar a Madrid. No nos conocen porque la publicidad de Melilla fuera es muy complicada y una noticia mala arruina una buena". Uno de los objetivos fundamentales del Gobierno Imbroda es exportar la imagen de Melilla, una labor que respalda el presidente del Clúster de Emprendedores de Melilla: “Hay personas que piensan que no es importante estar presentes en ferias como Fitur, pero una parte muy importante de la sociedad en la que vivimos es el marketing. Si no tienes marketing nadie te conoce y al final yo voy a la feria y en vez de vender mi empresa, vendo la ciudad porque creo que es más importante. Hay personas que no entienden la importancia de estar presentes en estas ferias, pero es primordial porque estás en un lugar cerrado y en muy poco tiempo puedes reunirte con diez personas”. Sin embargo, Gabriel Ruiz opina que no hay que centrar todos los esfuerzos en las nuevas tecnologías sino también en el sector servicios: “Soy muy pesado al decir que Melilla tiene que llenar la ciudad de ocio, de educación, de colegios, guarderías. Hay que darle un lavado de cara porque la ciudad tiene mucho potencial”. Pese a algunas necesidades de las que adolece la ciudad, Ruiz apuesta firme por el emprendimiento: “El conocimiento de todas las personas es muy cercano y la Ciudad tiene mucho dinero que invertir, y empezar a competir en Málaga es muy complicado, en Madrid ya ni te cuento, Barcelona, apaga y vámonos y Valencia también se ha convertido en un monstruo. Aquí es fácil. Si uno tiene una buena idea y la trabaja o incluso si es una idea normalita y la trabaja es muy probable que funcione”.