El teniente general Luis Martínez Coll, nacido en Melilla y jefe de la Región Militar Noroeste entre el 20 de diciembre de 1996 y el 11 de mayo del año 2000, falleció este domingo 11 de diciembre en Madrid a los 86 años de edad, según publica La Voz de Galicia. Luis Martínez Coll es un melillense que nació en 1936 en la ciudad autónoma y desarrolló parte de su trayectoria profesional en el Palacio de Capitanía General en A Coruña. El teniente general comenzó su carrera con su ingreso en la Academia General Militar de Zaragoza en 1953. Cuatro años después fue promovido a teniente, siendo destinado al Tercio ‘Gran Capitán’ 1º de la Legión, y luego estuvo en la Policía Territorial del Sáhara. En 1977 ascendió a comandante y posteriormente, en 1983, como teniente coronel, siendo designado jefe del Estado Mayor de la Brigada Aerotransportable. En este puesto, asumió siete años más tarde el cargo de jefe de Tropas y Gobernador Militar de Tenerife. A los cuatro años ascendió a general de división, siendo nombrado jefe de Tropas y Gobernador Militar de las Palmas de Gran Canaria. Martínez Coll fue 2º jefe de Unprofor (Fuerza de Protección de las Naciones Unidas) en una misión en la antigua Yugoslavia, y fue jefe de la División de Operaciones del Estado Mayor del Ejército hasta el año 1994. Fue entonces cuando consiguió escalar a jefe de las Fuerzas de Acción Rápida del Ejército de Tierra. Ya en posesión del rango de teniente general, Martínez Coll fue designado como jefe de la VI Región Militar Noroeste a finales de 1996. Estuvo desempeñando este cargo hasta el mes de mayo del año 2000 en el Palacio de Capitanía General en A Coruña. A lo largo de este tiempo, las regiones militares en las que se organizaba el Ejército de Tierra acabaron siendo reducidas a cuatro. De estas, la cuarta contaba con su sede en A Coruña y abarcaba diecinueve provincias de las comunidades autónomas de Galicia, Asturias, Castilla y León, Cantabria, País Vasco y La Rioja. Desde el Cuartel General de Mando de Apoyo a la Maniobra (MAM) de A Coruña han transmitido su más sentido pésame tanto a la familia como a los compañeros del general este lunes. Sin duda, una “irreparable pérdida”.