La Policía Nacional ha celebrado en Melilla este jueves su 200 aniversario con una jornada muy especial en la Plaza de Toros. Unidades especiales del cuerpo, algunas desplazadas desde la península para este acto, han realizado distintos ejercicios para exhibir sus habilidades ante miles de alumnos melillenses. Con motivo de su 200 aniversario, la Policía Nacional ha llevado a cabo un despliegue de sus unidades en la Plaza de Toros de Melilla. Lo ha hecho con la colaboración de la Delegación del Gobierno,la Dirección provincial del Ministerio de Educación, Formación Profesional y Deportes y de la Consejería de Juventud, Educación y Deporte. El evento ha contado con la participación de efectivos de unidades especializadas, algunas desplazadas exclusivamente a la ciudad desde la península para esta exhibición, como guías caninos, el Grupo Operativo Especial de Seguridad y hasta un helicóptero de los medios aéreos.
Durante la exhibición también han estado presentes las unidades de la Jefatura Superior en Melilla, como el Grupo de Atención al Ciudadano, la Unidad de Prevención y Reacción, los técnicos especialistas en desactivación de artefactos explosivos y drones. Cientos de escolares se han desplazado hasta la Plaza de Toros para disfrutar de esta exhibición de la Policía Nacional. En total han sido 2.500 alumnos de Educación Infantil y Primaria, procedentes de casi una veintena de centros. Tampoco han faltado en esta jornada usuarios del centro Francisco Gámez Morón y de Aspanies-Plena Inclusión. Además de los estudiantes, el evento también ha estado abierto a la ciudadanía melillense. Varias decenas de personas se han acercado también esta mañana a la Mezquita del Toreo para disfrutar de la jornada. Entre el público asistente también se encontraba la delegada del Gobierno, Sabrina Moh; el director provincial de Educación, Juan Ángel Berbel; o los consejeros de Seguridad Ciudadana, José Ronda, y de Juventud, Educación y Deportes, Miguel Ángel Fernández. Durante la exhibición se han realizado diferentes ejercicios para mostrar al público como actúa la Policía Nacional en diferentes escenarios, desde la desactivación de explosivos hasta la detención de varios delincuentes y el rescate de una persona secuestrada. Una jornada más que satisfactoria para todos los escolares que se encontraban allí. Tanto que, tras ver de cerca cómo trabajan los agentes, muchos se mostraron entusiasmados en formar parte del cuerpo cuando fueran mayores.
La Unidad de Guías Caninos se gana al público
Durante la exhibición de las unidades que ha realizado la Policía Nacional por su bicentenario, hay una que se ganó el respeto y la admiración del público: la canina. Los perros que trabajan para el cuerpo también tuvieron la oportunidad de demostrar cómo trabajan. Su actuación consiguió arrebatar estruendosos aplausos de los espectadores durante el evento. Los perros que pertenecen a la unidad canina son seleccionados por la Policía Nacional cuando tienen un año de edad. Los más juguetones y activos pasan al equipo y son entrenados para multitud de tareas, desde localizar estupefacientes y objetos explosivos hasta neutralizar delincuentes y rescatar personas. Lo primero que aprenden estos agentes peludos es a obedecer órdenes básicas, como seguir al agente o sentarse y tumbarse cuando se le ordena. Luego el entrenamiento se va complicando poco a poco para conseguir desarrollar distintas tareas, algunas muy complejas. Por las reacciones del público, no hay duda de que la exhibición de la unidad canina fue la más emocionante y también la más entrañable para todos los pequeños que se encontraban entre los espectadores. Estos presenciaron como los canes eran capaces de detectar una maleta que contiene drogas o acercarse a un objeto sospechoso de contener explosivos. Tareas para las que fueron entrenados. Pero, sin duda, los ejercicios más emocionantes ocurrieron cuando los perros, acompañados de los agentes, pudieron detener en varias demostraciones a varios delincuentes, llegando a saltar por encima de dos vehículos y neutralizar a su oponente o sacar a dos secuestradores por la ventanilla de un furgón y liberar a una rehén. Por lo que no era de extrañar que, una vez que acabó la exhibición, hubo incluso algunos pequeños que quisieron conocer a estos pequeños héroes de cerca.