El partido Equo regresa a la actividad política en Melilla tras ocho meses de parón. Tras salvar las incompatibilidades de conciliación de los 25 miembros que lo componen, la agrupación vuelve al panorama político siguiendo los principios de la ecología para aportar soluciones sostenibles en urbanismo, vivienda, movilidad, energía, residuos o empleo en Melilla. Según explicó ayer a El Faro el portavoz de este partido, Manuel Soria, Equo apuesta por una transformación política, social y ética de la sociedad para hacer sostenible y respetuosa con el medio ambiente esta ciudad con poca superficie y alta densidad demográfica.
La reaparición de esta agrupación, integrante del Partido Verde Europeo, está pensada para relanzar sus propuestas con motivo de las elecciones de 2019. “Desde Equo trabajamos para dar alternativas a la ciudad de Melilla y tratamos temas de urbanismo, medio ambiente y energía que el gobierno actual no está tocando”, aseguró Soria. Entre algunas de sus propuestas en el ámbito del urbanismo, destaca la de recuperar los cauces de los arroyos y no cubrirlos con hormigón “como simples alcantarillas que acaban con el suelo rústico e impiden que la tierra absorba el agua de la lluvia, generando riadas”.
De acuerdo con Soria, el exceso de hormigón se ve incluso en zonas catalogadas como “espacios verdes” por la Ciudad, entre las que se encuentran la Plaza de las Culturas y la Plaza Multifuncional, “ambas son grandes extensiones de hormigón, como la Granja Escuela, que es más bien un decorado que pretende ser un sitio natural lleno de hormigón”. Por ello pide relanzar proyectos de naturalización que no sean artificiales y que no dejen en evidencia el “desconocimiento de los procesos urbanísticos” de la actual gestión.
Alternativa política
Para Equo, Melilla debe dejar atrás “una época de sequía económica, política y social dominada por la derecha más rancia del panorama español, donde predomina el nepotismo, la recomendación y el engaño continuo” y “donde la actual oposición es incapaz de plantear alternativas que conduzcan a un cambio real y definitivo en el gobierno de Melilla”.
Soria lamentó que esta situación política desvíe de la opinión pública temas de sostenibilidad y se centre en cuestiones como la “españolidad” y “el tema catalán” que según el portavoz de Equo “poco tienen que ver con la situación de Melilla”, aunque reconoce que es normal que temas como la inmigración estén en la agenda local por las circunstancias actuales.
El portavoz de Equo también señaló otras cuestiones en las que Melilla “debería ser pionera” debido a sus características. Por un lado, planteó la conexión eléctrica de esta ciudad y de Ceuta con la península a través de un cable “como se está haciendo en el Golfo de Vizcaya con Francia”, al considerar que la forma de producción eléctrica actual es más cara que esta opción. Por el otro, aseguró que una mejor gestión de los residuos podría generar hasta 400 puestos de trabajo y remarcó la petición del partido de “anular la incineradora”, al no considerarla útil ni eficiente, sino más bien perjudicial.
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