En el marco de la segunda fase del Plan de Responsabilidad Social frente a la COVID-19 de Fundación Endesa, la compañía y la Dirección Provincial de Educación y Formación Profesional han suscrito un convenio de colaboración para combatir la brecha digital y con el que 500 alumnos y 13 centros educativos se verán beneficiados de estas ayudas. Estas se van a materializar con la entrega de unas 500 tabletas y tarjetas de conexión SIM a estudiantes con recursos limitados.
Por ello, el objetivo es facilitar el acceso a la educación digital de aquellos alumnos y centros educativos en centros educativos en situación de vulnerabilidad. De esta forma se ayuda a "romper un poco esa brecha digital que nos impone este estado de alarma reduciendo los riesgos sociosanitarios y compaginando la formación presencial con la telemática", explica Tomás Muñoz, responsable de la Central Diesel de Endesa Melilla.
Por su parte, el director provincia de Educación y Formación Profesional, Juan Ángel Berbel, agradeció la predisposición de Fundación Endesa que pone a disposición de Melilla 168.623 euros. "Una cuantía imperante para atender dicha brecha digital y en el momento en el que nos lo plantearon en los meses de julio y julio contaron con nuestra plena colaboración y disponibilidad total para facilitar los datos que han ido solicitando, tanto de los centros como de las familias que estaban en una situación vulnerable digitalmente", explicó Berbel. Comentó también que estos acuerdos-donación ayudaban mucho a la administración ya que permitía poder atender a más de 500 familias de la ciudad.
Además, indicó que también es una iniciativa "bastante ambiciosa" porque va destinada a 82 tutores docentes que se van a formar simultáneamente en nuevas tecnologías. Esta medida está recogida el convenio firmado este martes y que tiene como objetivo minimizar las carencias formativas respecto a contenidos digitales y preparar a los educadores y nuevas generaciones en este ámbito. Así que por un lado se abarca el aspecto formativo y por otro el comunicativo e informativo, a fin de que si hay que volver a una situación de trabajo telemático, estos recursos tecnológicos permitirían el alivio de la fecha digital.
Estas ayudas van dirigidas concretamente a los niveles de 5º y 6º de Primaria, en los cuales, según señala el director provincial "conviene perder el menor numero de clases posibles", de este modo, tener estas ayudas facilitarían una formación telemática. Estos dos niveles son esenciales para la formación de un estudiante, previos a su formación en secundaria, y por ello se verán reforzadas sus actuaciones en el aula con la adquisición de estos equipos y cumplir con uno de los grandes objetivos de la ley educativa como es iniciarse en la utilización, para el aprendizaje, de las Tecnologías de la Información y la Comunicación, desarrollando un espíritu crítico ante los mensajes que reciben y elaboran.
El Director Provincial valoró de forma positiva la iniciativa de la Fundación Endesa que ayudará a paliar la brecha digital en una ciudad como Melilla donde muchas familias no disponen de suficientes recursos económicos para dotar sus hogares de herramientas digitales lo que repercute en situación de crisis, como se ha visto en el tercer trimestre del curso 2019-2020, en un mayor distanciamiento en cuanto al acceso de igualdad de oportunidades entre el alumnado que dispone de medios informáticos y sabe utilizarlos frente a aquellos que carecen de la formación y de las herramientas telemáticas.
Berbel hizo hincapié en la importancia de, “si hay que volver a trabajar telemáticamente, tener esas herramientas y esa formación que ya se le está dando por parte de los centros también a su alumnado”.
“Endesa y la Ciudad Autónoma de Melilla tienen un vínculo histórico que nos lleva a ir más allá de la mera actividad energética, de ahí que para nosotros sea un placer poder contribuir con nuestro granito de arena a hacer que las familias melillenses puedan afrontar la nueva realidad que nos ha dejado la pandemia mundial del Covid”, señalaba durante el acto de firma Tomás Muñoz.
La segunda fase del Plan de Responsabilidad Pública de Endesa está dotada de 13 millones de euros, que se unen a los 12 millones de euros de inversión que la compañía realizó en el mes de marzo en la primera fase de su plan. Aquella primera inversión se destinó mayormente a la compra de material sanitario para apoyar a las entidades que estaban luchando en ese momento de forma directa contra el Covid. En concreto en la Ciudad Autónoma de Melilla, Endesa donó 30.000 mascarillas “que se pusieron al servicio de los trabajadores que estaban en aquel momento en primera línea de defensa”, tal y como explicó Muñoz.
La segunda fase el objetivo es hacer frente a la brecha digital que la pandemia mundial ha puesto en evidencia. En este sentido la compañía ha diseñado un plan de ayudas que se sostiene sobre dos ejes bien definidos: las familias y la activación económica.
Gracias a convenios como el firmado este martes se trabaja para paliar la brecha digital que se abre entre niños y jóvenes de diferente entorno económico cuando la educación se convierte en virtual y se necesitan herramientas específicas para acceder a las aulas. En total Endesa llegará a casi 500 colegios públicos de 160 municipios españoles, permitiendo que unos 5.000 alumnos tengan acceso a herramientas digitales que les permitan formarse.
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