Lola Camas Campoy es melillense, trabaja en el departamento de Recursos Humanos de Ingesa. Está casada y tiene dos hijos. El Faro de Melilla la entrevista porque tiene un gran mensaje en su corazón que desea compartir estas navidades: Jesús ha nacido para salvarnos.
-El mundo se ha cansado con el paso de los años… pero la Navidad sigue siendo joven. ¿Qué es para usted el auténtico significado de la Navidad, estas fechas tan señaladas en las que ya estamos metidos de lleno?
-Para mí como cristiana, la Navidad es recordar el nacimiento de Jesús. Nació en un pesebre, humildemente para salvar a la humanidad, a ti y a mí. Los cristianos ante este acontecimiento de semejante magnitud tendríamos que estar exultantes de felicidad. La Navidad es una fiesta alegre y por eso las calles, los escaparates y las casas se llenan de luz.
-De la Navidad me encanta lo que se refleja en los ojos de los niños. ¿Ha decorado de Navidad su casa?
-He puesto el árbol de Navidad porque da mucha alegría con sus adornos y luces. Pero la decoración más importante de mi casa en estas fechas es el Nacimiento. Lo compré cuando me casé y ya son 24 las navidades que lo he sacado para adornar mi casa, Es un nacimiento con unas figuras muy bonitas, muy entrañable y al que le tengo mucho cariño. La figurilla de Jesús la pongo en Nochebuena.
-“Tu sonrisa es, posiblemente, el mejor de los adornos de Navidad”. La Navidad es brillante, trae alegría y enciende un Año nuevo de luz y esperanza para todos.
-Así lo creo yo también, las navidades son fechas alegres, por eso nos reunimos en el trabajo, en la familia, los amigos. Estamos contentos y nos reunimos para celebrar.
-La Navidad es ese día que mantiene unidos el resto de los días. Cada año la Navidad te envuelva gratamente junto a los que más quieres.
-Los encuentros familiares son muy importantes. Durante todo el año podemos juntarnos las familias para celebrar o lo que queramos pero en Navidad es tradición, casi como un obligación. Es al menos la única oportunidad que tendremos al año para preguntar al otro cómo le van las cosas, para saber cómo está.
-La Navidad nos da la oportunidad de detenernos y pensar en las cosas importantes de la vida. Si la vida te da mil razones para llorar esta Navidad, habría que demostrar que también tenemos mil razones para soñar.
-La Navidad quieras o no invita a pensar. Con tanta tragedia que estamos viviendo en estos momentos (hay abiertas algunas guerras), noto que las personas se cuestionan más cosas y hay un acercamiento a Jesús. Se buscan respuestas a muchas incógnitas. Yo eso es lo que últimamente estoy sintiendo: que las personas tienen sed de respuestas verdaderas..., lo que les lleva a la fe.
-No podemos olvidar que estas fechas son también muy tristes para muchas personas. La nostalgia podría empapar el alma de muchos hasta no ver más allá y bloquearse hasta no permitir el disfrute de estas fechas tan entrañables como se merece. La navidad es un sentimiento.
-Es así, conforme nos vamos acercando a estas fechas el bombardeo de anuncios emotivos es continuo. Por ejemplo el anuncio de El Almendro...te llega al corazón y te puede provocar rechazo porque tu mente se va a las personas que ya no están contigo. El que se ha ido lo recuerdas durante todo el año, pero parece ser que en estas fechas se le echa más de menos si cabe.
-Todos sabemos que la Navidad no se trata de abrir regalos sino de abrir corazones pero se cae sin querer en el consumismo. Regalos, regalos y regalos.
-También eso es verdad, queramos o no vivimos en una sociedad materialista donde se compra más de lo que realmente se necesita para vivir. Pero a mí el bullicio de gente, la compra etc., tampoco me desagrada. Es bueno para la economía de nuestra ciudad.
-En Melilla conviven muchas religiones. ¿Usted cree que todos lo melillenses quedan contagiados de esta alegría cristiana? Jesús ha nacido para redimirnos a todos. La Navidad es el día que une todos los tiempos.
-Yo creo que todos los melillenses sean de la religión que sean se contagian de esta alegría cristiana. Yo tengo amigos musulmanes que el día de los Reyes Magos dan regalos a sus hijos. Si educamos en la tolerancia hay que enseñar a los hijos a apreciar lo bueno de las otras religiones.
-¿Qué valor destaca en estas fechas por encima de todo? Jesús nace en un pesebre y todo lo que trasmite es amor. -Nació para salvarnos a todos y cada uno de nosotros. Todo lo demás es consecuencia de eso. Los regalos, el reunirnos, las comidas, los cantos..., es decir todo ello es consecuencia de una alegría. Tenemos que estar exultantes de gozo.
-La Navidad es tiempo de darnos un tiempo para compartir, Mucha gente se reúne, hace regalos, en definitiva, celebra pero ha dejado de ir a misa…
-Un cristiano tiene la obligación de ir a misa al menos una vez a la semana. Entrar en un templo es entrar a un lugar de recogimiento y tiene una atmósfera que te envuelve. En La homilía el sacerdote da consejos que si los escuchas de corazón hacen mucho bien a la persona. Y la comunión es comer el cuerpo de Cristo y eso es esencial para alimentar la vida cristiana.
Le deseo que esta Navidad esté llena de felicidad en todo lo que haga y que disfrute de esa alegría el resto del año.
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