La UGR se encuentra entre las 300 mejores universidades del mundo tras haber ascendido más de 100 puestos en el ranking de Shanghái l La clasificación se centra en la reputación y producción investigadora.
Hace alrededor de 15 años que el ranking de Shanghái encabeza las clasificaciones mundiales de universidades. Se trata de uno de los listados más conocidos y reconocidos en todo el mundo. Analiza la producción investigadora con datos como el número de premios Nobel de un campus o sus publicaciones en las dos grandes revistas científicas internacionales (Nature y Science). Los campus españoles aparecen desde la primera publicación. En la última edición hay 12 universidades españolas, una menos que hace un año. Ésa es la mala noticia. ¿La buena? La Universidad de Granada (UGR) sube más de 100 puestos y se sitúa entre las 300 mejores del mundo. El ranking, publicado el pasado 15 de agosto, muestra que la UGR es el segundo mejor centro universitario de España, sólo precedida en esa lista por la Universidad de Barcelona. De este modo nuestro centro de enseñanzas superiores se encuentra por delante de otras españolas como la Complutense de Madrid, la Universidad de Valencia, las Politécnicas de Madrid y Barcelona, la Autónoma de Barcelona o la Universidad Pompeu Fabra de la misma ciudad condal. Desaparecen de estos 500 primeros puestos otras dos que sí estaban en la edición anterior: las universidades de Zaragoza y Sevilla. Nacional e internacional La UGR pasa del bloque de las 400 primeras en 2015 al de las 300 en el ranking de 2016. Entre los puestos 401 y 500 están las universidades de País Vasco, Valencia y Rovira i Virgili (Tarragona), que entra por primera vez. Entre las 500 mejores de la edición de este año se encuentran 204 campus europeos y 165 americanos, de los que 137 están en Estados Unidos. Hay otros 126 de Asia y Oceanía y cinco africanos. En el ámbito europeo, Alemania tiene 38, Francia 22, Italia, 19 y España, 12. El ascenso de la UGR Como la mayoría de los grandes rankings, el de Shanghái se centra en aspectos como la reputación y la producción investigadora: el número de graduados y profesores que han recibido un Nobel o una medalla Fields; el número de investigadores altamente citados, artículos publicados durante los últimos cinco años en las dos grandes revistas de investigación (Nature, Science y especializadas de alto nivel), el número de artículos indexados en Science Citation Index - Expanded (SCIE) y Social Sciences Citation Index (SSCI) y el rendimiento per cápita respecto al tamaño de la institución académica. Según, Alicia Benarroch, decana de la Facultad de Educación y Humanidades de Melilla, centro dependiente de la UGR, los dos primeros criterios no son los responsables de la “buena situación” adquirida este año por la UGR. “Lamentablemente el centro no cuenta con alumnos y profesores ganadores de premios Nobel y medallas Fields”, explica Benarroch. Sí destaca la “capacidad investigadora del profesorada” y la que ha llevado al ascenso respecto a la pasada edición. “La verdadera causa está en la labor de investigación realizada por los académicos. Importancia de investigar Promover y apoyar la investigación es uno de los grandes retos de todas las universidades, según la decana. “En la UGR, la investigación es promovida a través del Vicerrectorado de Investigación y Transferencia, cuya misión es incentivar la participación de los profesores y grupos en los planes de investigación, y conseguir grupos más competitivos y mejor situados internacionalmente”, dice. “La UGR, hace más de una decena de años, decidió premiar a los docentes activos en investigación y castigar a los no activos”, continúa. Benarroch lamenta que España sea el país donde el descenso de las partidas de I+D+i ha sido más acusado que en otros países europeos. “Es el pilar del desarrollo de un país”, asevera. Por ello destaca el logro obtenido por la Universidad de Granada y asegura que se debe a un cúmulo de factores. “Podríamos apuntar algunas posibilidades como que el docente investigador de la UGR está incrementando su participación en convocatorias europeas e internacionales, o que es más competitivo frente a los otras universidades españolas.