El SUP admite que no existe la misma presión migratoria que antes de 2019

El secretario general del Sindicato Unificado de Policía (SUP) en Melilla, Jesús Ruiz Barranco, ha asegurado este jueves que actualmente, pese a que “este verano se ha caracterizado por la entrada de inmigrantes irregulares por mar y ha habido varios intentos”, no existe la misma presión que antes de 2019, cuando estaban abiertos los cuatro puestos fronterizos (Beni Enzar, Farhana, Barrio Chino y Mariguari).

Aunque la defensa del perímetro, tanto por tierra como por mar, depende de la Guardia Civil, la Policía Nacional lleva el control de la frontera. Cuando había más presión de los inmigrantes irregulares, actuaban la Policía Científica para las identificaciones y la Brigada de Inteligencia para las peticiones de asilo o para las devoluciones, así como la Unidad de Seguridad Ciudadana, que se encargaba de la protección de la frontera y de colaborar con la Guardia Civil en el control del perímetro fronterizo.

Pese a todo, los agentes siguen realizando su trabajo, por ejemplo, respecto a las peticiones de asilo –con los dos edificios nuevos que se han hecho- de los inmigrantes irregulares que entran, principalmente marroquíes, aplicándoles el protocolo de la entrevista personalizada y controlando que permanezcan en Melilla con las suficientes garantías, así como asesorando en el trámite documental.

Actualmente la Policía Nacional dispone en Melilla de unos 500 agentes catalogados, aunque mensualmente, o cada dos semanas, reciben ayuda de las Unidades de Intervención Policial (UIP), que es la que se encarga de la seguridad propia de la frontera, y de otras unidades operativas en momentos puntuales de intervenciones policiales como la Brigada de Información, la Policía Judicial o la Policía Científica. Así, el total en esos momentos puede ser de unos 550 efectivos según los cálculos del secretario general del SUP en la ciudad autónoma.

Frontera inteligente

Durante el curso sobre capacidades psicotécnicas organizado por el sindicato, su máximo representante en Melilla ha confiado en que, en el tiempo que resta para la implantación de la frontera inteligente en Beni Enzar, se proporcione a los agentes de Policía una adecuada formación, ahora que ha pasado la Operación Paso del Estrecho (OPE) y estamos “en una temporada en la que es más tranquila la entrada y salida de Melilla”.

Ruiz Barranco se ha manifestado de esta forma después de que las pruebas realizadas este año al comienzo de la OPE hubiera, según ha dicho, “muchos problemas con las instalaciones”, ya que, ha enumerado, no funcionaban los aparatos de aire acondicionado y los verificadores de dispositivos de las cabinas de control documentas “fallaban mucho y no daban abasto”.

En este sentido, el secretario general del SUP en Melilla ha indicado que, hasta entonces, apenas se formó a los agentes, quienes tuvieron que aprender sobre la marcha todo lo relacionado con el sistema de identificación de pasaportes.

La ley de seguridad ciudadana

Por otra parte, Ruiz Barranco se ha referido a la reforma de la ley de seguridad ciudadana, conocida popularmente como ‘ley mordaza’, para expresar su disgusto sobre ella porque, a su parecer, quita “autoridad” a los agentes.

Para empezar, ha comentado que, “en una calle cada vez más violenta y cada día con más agresiones a los policías nacionales”, esta reforma va a dificultar el trabajo de identificación, que antes, si alguien se negaba a dar sus datos, se podía hacer con facilidad trasportándolo a la Jefatura Superior de Policía.

El secretario general del SUP a nivel local ha insistido en que es “un error” y ha añadido que, aunque evidentemente habrá que aplicarla, existe “un descontento generalizado muy grande en la Policía Nacional, tanto a nivel nacional como en Melilla”. En relación a ello, Ruiz Barranco ha lamentado que se quedan sin los medios de que disponían antes “para intentar que la autoridad se respetara, siempre atendiendo a los derechos humanos”.

Lo mismo, ha dicho, sucedía en la frontera, ya que, según él, los rechazos se han producido siempre respetando los derechos humanos y sin que hubiera ningún problema, y teme que esta modificación afecte negativamente a su trabajo.

A pesar de que la Unión Europea (UE) aprobó algunos rechazos y devoluciones en la frontera en un apartado específico de la ley de seguridad ciudadana vigente hasta la fecha, también se quiere cambiar eso. Ruiz Barranco asegura que no lo entiende cuando en Melilla no ha habido problemas más allá de cuando ha habido saltos masivos con “tantos muertos” como el 24 de junio de 2022, hecho que considera “una pena”, pero del que ha dicho que los agentes no son “culpables”.

Aunque el sindicato ha intentado que el Ministerio del Interior eche atrás la propuesta de reforma, Ruiz Barranco ha afirmado que el problema es que el titular de la cartera, Fernando Grande-Marlaska, los atiende “muy pocas veces” y, en cambio, envía a otras personas a reunirse con ellos para resolver “conflictos” como el de la reivindicación de la equiparación salarial con el resto de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y la consecución de las mismas condiciones de jubilación que el resto.

Agresiones a policías

Por último, preguntado sobre si está habiendo más agresiones a policías en Melilla, como está sucediendo en el resto de España, el secretario general del SUP ha dicho que se podría “extrapolar” la situación, pero “dentro de unos límites mucho más pequeños”.

Según Ruiz Barranco, en la ciudad autónoma “se controla bastante bien la seguridad ciudadana”, especialmente desde que la frontera es tan “restrictiva” y no como hace cinco años, cuando aún existían cuatro pasos fronterizos y había presión tanto en ellos como en toda la valla. “Ahora se nota mucho menos esa presión migratoria en la que entraban 20.000 ó 30.000 personas a Melilla, con mucha gente que quería hacer daño”, ha proseguido, antes de finalizar diciendo que, aunque ya no sucede eso y la seguridad ciudadana está “bastante bien controlada”, sí es cierto que, “de vez en cuando, hay alguna intervención en la que compañeros son agredidos y queda impune”.

Las FCSE, siempre vigilantes

La Delegación del Gobierno ha informado de que, pese a que la situación actualmente es de calma en la frontera, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, aunque no se encuentren en situación de alerta, sí que están “en vigilancia activa 24 horas al día los 365 ”. En este sentido, estas fuentes han confirmado que la presión de entrada por mar se redujo este verano respecto al anterior, pero que se mantiene durante todo el año. Además, aun desconociendo lo que pueda suceder con la llegada del frío, la Delegación ha asegurado que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado adecúan su respuesta en función de los escenarios que se presentan en cada momento.