El Senado dio luz verde este martes a la propuesta del PP de encomendar a la Ciudad Autónoma la gestión de la sanidad pública, según la votación que tuvo lugar en la Comisión correspondiente y en la que los populares ostentaban la mayoría. Se trataba de una moción por la que se insta al Gobierno de Sánchez a llevar a cabo esa concesión como consecuencia de las "condiciones muy críticas y de absoluta precariedad" que atraviesa el sistema sanitario en Melilla.
Fue la senadora melillense Isabel Moreno la que defendió la iniciativa del grupo popular. En su intervención habló de la "falta de apoyo y el escandaloso abandono del Gobierno de España" con respecto a los melillenses, motivo por el que aseguró que su intención con esta moción era también procurar que se "tomara conciencia" de la "extrema gravedad de la situación sanitaria" en la ciudad.
Para los populares, el instrumento jurídico de la encomienda de gestión "es la mejor solución posible" a los "grandes retos y desafíos" que se enfrentan en un área de tanta sensibilidad como es la salud de los ciudadanos. "Es imperdonable que siendo los dos únicos territorios que dependen del Gobierno de España, seamos víctimas del abandono y la desatención".
Isabel Moreno señaló el "deterioro incontestable e imperdonable" de la sanidad melillense y habló de la huelga de los médicos, nunca desconvocada porque "no se ha dado ni un solo paso para mejorar las condiciones" del sistema.
En su relación de carencias apuntó hacia la atención primaria que, según dijo, está "descabezada y desnutrida". "Acumula nueve meses sin dirección médica y faltan médicos de familia y pediatras". A modo de ejemplo recalcó que solo hay un especialista pediatra en los ambulatorios y que los facultativos debe atender diariamente a 80 pacientes. "La atención primaria está en pañales", sentenció.
Y el mismo caso ocurre, advirtió, con el Hospital Comarcal y los especialistas. "También está descabezado y desnutrido porque ha transcurrido más de un año desde que se cesó al último gerente sin que haya habido nuevo nombramiento y sufre una grave infradotación de recursos humanos".
De hecho, insistió en que Melilla presenta la ratio más baja de médicos por cada mil habitantes de toda España mientras que la plantilla de especialistas es la "más esquilmada y raquítica" de Europa.
Habló la senadora de plantillas envejecidas sin relevo generacional, de ausencia de guardias presenciales, especialidades deficitarias y largas listas de espera. "No se puede mantener la actividad diaria de los quirófanos por falta de anestesistas y de reanimación", aseguró.
Reconoció la senadora popular que la falta de médicos es un mal endémico en España, pero dejó claro que "la gravedad de lo que vivimos en Melilla no tiene parangón", auspiciado por "la falta de respuesta, de iniciativa y de voluntad política del Ministerio de Sanidad".
Asimismo, recordó que hace año y medio que se declaró a la ciudad como zona de difícil cobertura y que a lo largo de todo este tiempo "no se ha dotado ni de presupuesto ni de medidas aparejadas" tal circunstancia. "Nos han colocado a la cola de todo condenando a los melillenses a una situación en la que está en juego un bien tan preciado y tan valioso como es la vida".
De ahí la iniciativa del PP de pedir la encomienda de gestión para la Ciudad Autónoma. "Queremos una sanidad digna y justa como la de cualquier otro ciudadano español", se reiteró para incidir en que han sido seis los ministros que han pasado por la cartera de Sanidad desde que Sánchez gobierna y "la realidad es que nuestra Sanidad agoniza".
En definitiva, argumentó que la encomienda de gestión es la mejor solución porque entre el Gobierno en Madrid y el de Melilla hay una diferencia: "Nosotros sí consideramos que la sanidad de los melillenses es una prioridad, a nosotros sí nos duele Melilla y sí tenemos una voluntad política de dar solución a los problemas" mientras "el Gobierno del PSOE permanece impasible ante esta agonía".
No olvidó Moreno citar al director territorial de Ingesa, Omar Haouari, al que acusó de "estar escondido y asolado por los escándalos". Se refería tanto a los supuestos sobrecostes del Hospital Universitario como a las denuncias por acosos laborales a mujeres profesionales. "Los feministas que no han alzado ni un solo socialista la voz por estas mujeres que han padecido presuntos acosos y ni se han depurado responsabilidades políticas ni de ningún tipo".
Finalmente, instó a los miembros del PSOE a apoyar la moción o en su caso "asumir realmente de una vez sus competencias".
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