El Puerto de Melilla ya destina unos 2,5 millones de euros al año a bonificaciones del transporte marítimo, entre las que se cuenta la rebaja fiscal del 40% en la tasa de buques; otro 40% en la tasa de mercancías, de un 20% en la tasa de peaje referente a pasajeros en régimen de transporte y del 20% a vehículos en régimen de viajeros. Ahora, tras la aprobación del Real Decreto-ley 6/2022 publicado este miércoles en el Boletín Oficial del Estado, se suma la bonificación del 80% de la cuota tributaria final de las navieras que atracan en Melilla. Esto, según fuentes conocedoras del tema, se traducirá entre el 1 de abril y el 30 de junio en que por cada 100 euros, las compañías marítimas sólo tendrán que abonar 7. La nueva rebaja fiscal, añaden las mismas fuentes, asesta un golpe a las cuentas del Puerto de Melilla que no gozan de la misma bonanza que la Autoridad Portuaria de Baleares, que el año pasado facturó 84 millones de euros y tuvo un beneficio neto de 19 millones. Una situación similar vivió el Puerto de Tenerife, que facturó 50,6 millones y ganó 16,4 millones. En cambio Melilla cerró 2021 con 5 millones de pérdidas. En ese contexto se preguntan por qué apuntan a Melilla a la rebaja de las tarifas portuarias que no van a atraer más clientes. Por eso en Melilla, la nueva bonificación del transporte marítimo ha tomado por sorpresa a las autoridades portuarias que desconocían que el presidente de la Ciudad, Eduardo de Castro, había dado el visto bueno a una medida que beneficia a las navieras y que de momento se desconoce si repercutirá en lo que paga el cliente por las mercancías que llegarán en estos dos meses de bonificación adicional al transporte marítimo. El dinero que dejará de ingresar el Puerto de Melilla por esa nueva bonificación estará sujeto a la aprobación de un crédito de 5,5 millones que será incluido en los Presupuestos Generales del Estado de 2022.