EL Partido Popular de Melilla aguantó ayer el tipo y ganó en Melilla, pese a los nefastos resultados que cosechó la formación en el resto del territorio nacional.
La noche, en la que durante mucho tiempo Coalición por Melilla iba por delante de los populares en el recuento, terminó finalmente con la victoria del candidato del PP al Congreso Fernando Gutiérrez Díaz de Otazu y la revalidación de los senadores Juan José Imbroda y Sofía Acedo, que volverán a sentarse en la Cámara Alta.
El PP melillense ha logrado capear el temporal que ha dejado al partido con los peores resultados nacionales de su historia. Pablo Casado ha perdido 71 escaños y se queda solo con 66 en el Hemiciclo de la Cámara Baja. Los casos de corrupción de estos año han hecho que muchos votantes tradicionales del PP se refugien en Ciudadanos y en Vox. Al PP le toca ahora reordenar su casa antes de volver a ser una alternativa de Gobierno en España.
También sirven estas elecciones como legitimación de Pedro Sánchez que será presidente si logra alcanzar acuerdos de investidura.
Aquí en Melilla, queda menos de un mes para las elecciones municipales y el PP ha mostrado músculo, ha salvado el primer envite y llega a los próximo comicios como el rival a batir.