El perfil del votante por correo: Bajo nivel cultural y falto de recursos económicos

El juez instructor del caso del ‘voto por correo’ considera que las sedes de Juventudes Socialistas y CpM fueron la ‘base de operaciones’ de la trama. Militantes y ‘cabezas de barrio’ enviaban allí a los votantes que captaban en barrios periféricos. El auto de la investigación del caso del ‘voto por correo’ explica cómo se elaboró la supuesta trama, ideada por los líderes de PSOE y CpM, Dionisio Muñoz y Mustafa Aberchán, respectivamente, sus “autores intelectuales”, según el juez instructor. La investigación ha contado fundamentalmente con las declaraciones de dos socialistas imputados en el proceso, Nordin Abdel–Lah e Ikram Aanan. Sus testimonios están respaldados los de los 655 testigos interrogados. El juez instructor señala su auto que las sedes de CpM y Juventudes Socialistas (JSME) fueron la ‘base de operaciones’ de la supuesta trama que tenía por objetivo conseguir votos para la candidatura conjunta PSOE–CpM. Para ello buscaron posibles votantes en los barrios periféricos, según las declaraciones de Abdel-Lah recogidas en el auto. Por su parte, Aanan manifestó ante el juez que las personas que ella vio en la ‘base de operaciones’ “daban la sensación de tener muchas necesidades económicas y no parecían tener inquietudes políticas”.
Las personas de confianza designadas por Muñoz y Aberchán, explica el juez, fueron las encargadas de montar la estructura de la supuesta trama, cuyo siguiente paso era la captación y movilización en “los barrios más desfavorecidos y aprovechando el escaso nivel cultural”, según la declaración de Abdel-Lah. Éste, junto con Gabriel Jiménez (entonces secretario de Política Municipal y Autonómica del PSOE), acudieron a los barrios Cabrerizas, Monte María Cristina, Reina Regente, La Cañada e Hipódromo para comenzar a difundir la consigna dada por Muñoz: Ofrecer puestos de trabajo en los Planes de Empleo a cambio de votar por correo en las elecciones generales del 9 de marzo de 2008 a favor de la candidatura PSOE–CpM.
Más de un centenar de testigos aseguraron al juez instructor haber acudido a las sedes de CpM o JSME para solicitar el voto por correo tras haber escuchado a sus vecinos que podían acceder a un puesto de trabajo sólo con votar a la coalición de PSOE y CpM.
Abdel-Lah declaró que para una mayor difusión del mensaje, se repartieron los barrios con militantes de CpM que eran personas de confianza de Aberchán. Éstos cumplían la misma misión que Andel-Lah y  Gabriel Jiménez en el PSOE. El mensaje era claro:  “Habría al menos un puesto de trabajo para cada familia en los Planes de Empleo y que cuantos más votos se realizaran por miembros de la familia, más posibilidades existirían de que se adjudicasen más o menos puestos de trabajo”.

‘El boca a oreja’
La fórmula del ‘boca a oreja’ fue otra de las herramientas que la supuesta trama utilizó para movilizar a los votantes en los barrios periféricos, a través de los llamados ‘cabezas de barrio’. Abdel–Lah y Aanan explicaron al juez que esta figura pertenece al engranaje natural de los partidos políticos para movilizar a los vecinos.
Por su parte ex militante de CpM Abderraman Benyahya (hoy enfretado políticamente a Aberchán) declaró ante el juez que el ‘boca a oreja’ era un método efectivo de movilización.
Otros testigos que colaboraron en la campaña electoral del PSOE destacaron ante el juez instructor la cantidad de personas que diariamente acudían a las sedes de ambos partidos, donde se informaban de cómo votar por correo para acceder así a un Plan de Empleo de la Delegación.
Muchos de estos votantes han reconocido fotográficamente a los supuestos implicados en la trama de ambos partidos ante los investigadores. Se encontraban en la ‘base de operaciones’ explicando el proceso: Aberchán y sus personas de confianza en el partido por un lado, y Muñoz, Abdel–Lah, Rabea Aomar y dirigentes de JSME por otro. Todos ellos están imputados en la causa, según recoge el auto.

Movilización puerta a puerta
Las promesas de un empleo se ampliaron a los militantes y ‘cabezas de barrio’ que colaboraron en la captación de votantes. De hecho, el juez ha comprobado que el 90% de ellos trabajó posteriormente en los Planes de Empleo de la Delegación. Las declaraciones de los principales testigos destacan que los ‘cabezas de barrio’ llegaban a la sede con fotocopias de DNI de familias enteras y que después de rellenar el impreso de solicitud del voto por correo, iban puerta a puerta para recoger el sobre marrón que contenía la documentación electoral. En otras ocasiones, los propios votantes llevaban la solicitud a Correos y luego volvían con el resguardo amarillo a la sede de CpM o JSME para entregarlo.
Durante todo el proceso, imputados socialistas y cepemistas elaboraban listas de estos votantes, que luego supuestamente tendría prioridad para acceder a un Plan de Empleo. Pero este primer listado no era el definitivo. Cuando empezaron a llegar los sobres marrones con la documentación electoral, los votantes captados volvían a la calle Ejército Español donde los supuestos implicados en la trama introducían la papeleta de la candidatura de PSOE–CpM en el sobre electoral incluso delante del propio votante. Según el juez, numerosos testigos han explicado este proceder durante su declaración, incluido Benyahaya que dijo haber discutido con Abdel-Lah por este motivo. De hecho, el instructor destaca en el auto la declaración de nueve personas que votaron por correo y abrieron su sobre delante de ellos en la sede de CpM y JSME.
En la ‘base de operaciones’ socialistas y cepemistas implicados en la supuesta trama tenían en su poder los impresos de solicitudes del voto por correo. Según el auto, un contacto del socialista Alonso Díaz les facilitaba estos impresos empaquetados aún en el plástico y sin abrir.
El juez considera “llamativo” que muchos de los votantes por correo desconocieran, al ser preguntados, cómo es este trámite. Según las declaraciones de Aanan y Abdel-Lah, los imputados en la trama ayudaban a las personas que no sabían leer ni escribir a rellenar el impreso de solicitud. Los ‘cabezas de barrio’ incluso llevaban en su propio vehículo a personas de los barrios periféricos hasta la calle Ejército Español para iniciar el trámite del voto por correo.