El ICL Manresa se colocó con un 2-0 al derrotar al Melilla Baloncesto por el resultado de 76-74, en la eliminatoria final por el ascenso a la ACB. En los últimos segundos, Dani Rodríguez tuvo el lanzamiento de tres para ganar pero lo falló.
El conjunto del Club Melilla Baloncesto comenzó de manera muy enchufada el segundo de los partidos de la final por el ascenso a la Liga ACB al colocar un primer parcial de 0-9 a su favor, cuando se cumplió el minuto 3 de este enfrentamiento. La buena defensa del Decano hizo daño en este inicio de partido a la escuadra manresana que no vio el aro con facilidad.
El nivel de buen baloncesto melillense fue mantenido hasta el minuto 6, cuando el marcador registró un 6-13. En los siguientes compases del choque unos malos ataques de la escuadra de nuestra ciudad fueron aprovechados a la perfección por el cuadro catalán para colocar un primer parcial de 6-0 y ponerse con un 12-13 en el electrónico.
Pero el conjunto melillense no estaba por la labor de dejarse adelantar en el marcador con cierta facilidad y gracias a dos triples de Samb y Diego Kapelan, en los últimos compases de este primer periodo hizo que el Melilla Baloncesto se marchará a la finalización del primer periodo con el resultado de 13-19.
El segundo de los periodos comenzó mal para los intereses de la escuadra de nuestra ciudad puesto que en tan sólo dos minutos, el ICL Manresa se colocó con un 18-19, teniendo que parar el partido el primer entrenador melillense, Alejandro Alcoba para romper el buen baloncesto desplegado por el cuadro catalán.
Este parón surtió los efectos deseados para volver a su equipo en el partido para colocarse con un tanteador de 20-14, todo ello en el minuto 24 de este partido, en un enfrentamiento tremendamente físico e igualado y con mucho que señalar por parte de los tres colegiados del choque.
Dos triples consecutivos de Manresa hizo que dieran la vuelta al electrónico, en menos de un minuto. La presión ambiental en el pabellón del Nou Congost fue tremenda lo que propició alguna pérdida que otra del Club Melilla Baloncesto.
A pesar de tener todo en contra, el cuadro de nuestra ciudad se mantenía por delante en el electrónico con un 27-30. El acierto desde la línea de tres puntos del cuadro local hizo que se mantuvieran por delante en el marcador con pequeñas ventajas.
Al descanso se llegó con el resultado de 38-37 y como se pudo ver en el anterior partido la igualdad fue máxima.
Durante los primeros compases de este tercer periodo las alternancias en el electrónico fueron continuas. Con el paso de los minutos los manresanos adelantaron sus líneas, sobre todo en su sistema defensivo, con una gran presión dificultó mucho el ataque del Club Melilla Baloncesto para sumar puntos a su favor.
Una de las máximas diferentes en el marcador en favor del ICL Manresa llegaría en el minuto 6, con un 52-46. Las pérdidas de balón de los melillenses fueron otra de las claves para que la ventaja local siguiera en aumento, con dos seguidas del base del Decano, Miki Servera.
Dos triples de Djuran, que se convirtió en el gran protagonista en los malos momentos, a falta de un minuto para el final de este tercer periodo hizo que se rompiera el parcial de los locales y los melillenses colocaron un 55-55, resultado con el cual se llegaría a la finalización del mismo.
La alta presión por lo que se estaban jugando cada uno de los dos equipos hacia que en cada una de las jugadas se viera una gran lucha tanto en las defensas como en los ataques. El Manresa, con un triple de Muñoz, se colocó con un 60-57, los melillenses perdían demasiadas claras de coger ventajas en el marcador del Nou Congost.
Hasta que apareció el gran lanzador del Club Melilla Baloncesto, Diego Kapelan, que con dos triples de manera consecutiva puso a su equipo con un 60-63, a falta de seis minutos y medio para la conclusión de este enfrentamiento.
De nuevo, Manresa cogió una buena racha de acierto para con tres canastas de manera consecutiva darle la vuelta al marcador para y colocarse con el resultado de 68-65, a falta de cinco minutos para el final del partido. Cada ataque de los dos equipos se convertía en una auténtica odisea por el alto nivel defensivo habiendo alternancias en el marcador ya que a falta de tres minutos para la conclusión el electrónico registró un tanteador de 70-70.
El Decano llegaría al último minuto con un punto de desventaja en el electrónico con un 75-74, pero con balón para Manresa.
El rebote ofensivo de Manresa hasta en dos jugadas consecutivas fue clave para que se remontara el marcador ante la desesperación del banquillo del Melilla Baloncesto. Con un 76-74 se llegó a falta de seis segundos y con balón para Melilla , el esférico le llegó a las manos de Dani Rodríguez que falló su lanzamiento de tres puntos para darle la vuelta al marcador de este partido.
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