El Gobierno no tiene en mente abrir por ahora otros pasos fronterizos distintos al de Beni Enzar, según ha asegurado la delegada del Gobierno en Melilla, Sabrina Moh, en una rueda de prensa este miércoles.
Por lo tanto, Moh ha afirmado que, hasta el próximo día 15 de septiembre, seguirán pasando las personas “en las condiciones establecidas” en su momento dentro de la “apertura gradual” de la frontera de Beni Enzar. Lo que sí ha confirmado la delegada es que “el porteo es una imagen pasada” y que la apuesta del Ejecutivo de Pedro Sánchez está centrada en modernizar este paso –y no, por ahora, algún otro, como el del Barrio Chino- para que cumpla con los estándares europeos de entrada y salida, para lo cual se está materializando la obra.
Sobre las colas en el paso de Beni Enzar, la delegada ha indicado que el nuevo escenario implica que todo el mundo ha tenido que adaptarse a una nueva realidad, pero ha puntualizado que “no hay picos de espera durante 24 horas los siete días de la semana”, sino, tan sólo, “momentos puntuales en que hay una mayor afluencia de personas” y, por lo tanto, los tiempos de espera son algo mayores también.
La delegada ha negado los “rumores” de gente entrando en Melilla a nado o a bordo de pequeñas lanchas por el Dique Sur y ha confirmado que, basándose en “datos reales”, la única entrada recogida durante los últimos días fue la que se produjo el martes en Horcas Coloradas, donde siete inmigrantes fueron interceptados por la Guardia Civil. “Posiblemente haya habido alguna entrada en algún momento puntual, pero no es la tónica”, ha reafirmado.
Preguntada sobre el informe del Ministerio del Interior sobre inmigración hasta el día 31 de julio, que habla de 71 personas llegadas por mar y 1.122 por tierra, Moh ha deducido que el aumento al que se refiere dicho informe tiene que ver con las dos entradas grandes a través de la valla que se han producido este año –en marzo y junio- y con que el año pasado no hubo dichas entradas en las mismas fechas. De hecho, según ha informado, “no ha habido un aumento de peticiones de asilo, sino un descenso considerable”.
La delegada también ha sido cuestionada sobre si tenía conocimiento de que, según algunas fuentes, hay un grupo de más de 2.000 sudaneses esperando en Marruecos para entrar en Melilla. A este respecto, Moh ha subrayado la importancia de la vigilancia, con el helicóptero, los drones y un coche centinela con cámaras de visionado nocturno, que provee de información para coordinarse con Marruecos llegado el momento.
El Ministerio del Interior mantiene el refuerzo de agentes en el perímetro fronterizo entre España y Marruecos en Melilla para intentar evitar que se produzcan entradas irregulares de inmigrantes. Además, Moh ha indicado que tiene el “compromiso” del Ministerio del Interior de que, si es necesario, se enviarán más agentes a la ciudad autónoma.
Las cifras del CETI
Por otro lado, Moh ha informado de que actualmente hay menos de 150 personas en el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI), ya que, durante los últimos tres meses, se han ido realizando traslados de unas 600 personas en total a la península con periodicidad semanal.
En este sentido, la delegada ha comentado que dichos traslados han sido siempre normales, salvo durante los años 2020 y 2021, porque la pandemia y el estado de alarma vigente no lo permitían.
La aduana comercial
Por último, y en referencia a la aduana comercial –cerrada desde 2018-, Moh ha seguido sin dar una fecha de reapertura, pero sí ha informado de que el grupo que se estableció ese año ha ido recuperando los trabajos –que fueron interrumpidos por la pandemia- durante los últimos tiempos.
De hecho, la delegada ha apuntado que hay un “compromiso” por parte del Gobierno de que la aduana se abrirá en cuanto sea posible.
De cualquier manera, también ha recordado Moh que “en todo momento” se habló, primero, de la reapertura para personas y, más tarde, del paso para mercancías.
Lo peor de este gobierno Frankenstein de Pedrito es que a parte de ser el más mentiroso e incompetente que ha habido en España, es que descaradamente quiere reírse del pueblo ,haciéndonos creer que todo cuanto nos impongan deberíamos de tomarlo y aceptarlo y creerlo ciegamente como mandato divino. Pienso que las leyes deberían de actualizarse para sancionar a estos políticuchos, parásitos y embaucadores, que con el único afán de su ambición de protagonista y económica, solo atentan contra el bienestar social y contra los principios de unidad nacional. Deberían de ser juzgados y condenados. Sólo así se concienciarian quienes tienen como meta la política para sus fines personales y no para defender los valores sociales y políticos de España.
Según se entiende es que se abrirá lo que Marruecos quiera y cuando ellos quieran.