“El cuidador debe poder elegir a qué centro llevar a su abuelo”, declaró a El Faro la directora del Centro de Día de Alzheimer y presidenta de la asociación de familiares de enfermos de esta patología de la ciudad, María Dolores Arjonilla, quien informó de que ante la falta de financiación este lugar de atención a las personas mayores cerraría sus puertas para el próximo año.
Hace diez años, cuando no había ningún centro o institución que cuidara de forma especializada a estos enfermos se constituyó, con la ayuda del Gobierno Central y de la Ciudad, este lugar por el que han pasado decenas de personas que han podido disfrutar de las mejores atenciones posibles. Así, la presidenta de la Asociación de Alzheimer indicó que por aquel entonces y durante años se destacaba la labor de este centro de día y se aseguraba su calidad y excelencia. De esta forma, Arjonilla se pregunta qué hubiera pasado con todas estas personas y sus familias si no hubiera estado en funcionamiento esta entidad, por lo tanto, “merecemos un respeto”, declaró.
Sin financiación para el 2011
El problema de la financiación de este hogar para catorce abuelos melillenses es que hasta el año 2009 se nutría de una partida presupuestaria destinada a este tipo de servicios sociales para personas mayores y que con la entrada de la Ley de Dependencia finalizaba su programación. No obstante, durante este 2010 el centro funcionó gracias a un acuerdo entre el Gobierno Central y la Ciudad que a medias subvencionaron este proyecto. Sin embargo, este convenio sólo ha durado un año y ahora el Centro de Día de Alzheimer se ve sin recursos económicos para continuar su labor solidaria e imprescindible durante el año 2011.
Arjonilla argumentó que desde la Secretaría de Política Social de Madrid se le indicó que para este nuevo año el Centro de Día presentara su proyecto a través de la confederación de asociaciones de Alzheimer con el objetivo de conseguir recursos económicos. En este sentido, el proyecto se derivó por esta vía en él se presentaban las actividades y necesidades de este hogar con un presupuesto de 177.000 euros.
“Nunca pensamos que nos iban a dar todo el presupuesto por el gran número de recortes que se están haciendo, pero por lo menos esperábamos la mitad”, aseguró la directora del centro añadiendo que para su sorpresa “a través de la confederación sólo se han aportado 5.000 euros, es decir, un 5 por ciento de lo que se pidió”. “Estos es una vergüenza y nos han engañado totalmente”, aseguró.
Con sólo 5.000 euros el Centro de Día para enfermos de Alzheimer no podrá funcionar ocasionando grandes perjuicios no sólo a los abuelos atendidos sino a sus familias que confiaban en esta institución para el cuidado de sus mayores.
Intento de negociaciones
Arjonilla aseguró que han intentado volver a hablar con la Secretaría de Política Social en Madrid para buscar una solución cuanto antes pero no han obtenido respuesta. Y la misma situación ha ocurrido con el delegado del Gobierno, Gregorio Escobar, a quien solicitaron una entrevista para hacerle ver su problemática y aún no les han confirmado esta reunión. En cambio, el presidente de la Ciudad, Juan José Imbroda, sí mantuvo una charla con este colectivo y les ofreció toda la ayuda posible.
En este centro trabajan entre cinco y siete personas según los programas que estén en marcha y que evidentemente sufrirán el cierre quedando el calle cuando se trata de gente con experiencia en el cuidado de estos enfermos, además de otros dos abuelos que reciben atención en casa y que se realiza por el personal de esta institución.
Por último, Arjonilla indicó que siempre habían tenido el apoyo de las Administraciones, ya que la Ciudad aportó los medios de transporte o el local y el Imserso la financiación de otros programas y la asociación de Alzheimer, por lo que esperaba que todo se solucionara cuanto antes y que el cierre del centro no se haga efectivo.