El Colegio Oficial de Enfermería de Melilla aplaude el acuerdo alcanzado entre la Ciudad Autónoma de Melilla y el Ministerio de Educación, Formación Profesional y Deportes, que permitirá la contratación de 17 enfermeras escolares en los centros públicos de Educación Infantil y Primaria durante el curso 2024-2025.
Este convenio responde a una de las principales exigencias de la profesión enfermera, convirtiéndose en un ejemplo claro y concreto del gran impacto positivo que las diferentes administraciones públicas pueden generar en la población cuando trabajan juntas en favor del bienestar común. En este caso, la colaboración entre el Gobierno central y la Ciudad Autónoma ha permitido implementar un programa que sin duda mejorará la seguridad sanitaria del alumnado, reforzará la valoración de la profesión enfermera y fomentará la educación sanitaria y la cultura de la Salud desde la infancia.
El presidente del Colegio Oficial de Enfermería de Melilla, Javier Miralles, ha destacado la importancia que este tipo de acuerdos institucionales tienen para el colectivo: “Desde la Enfermería recibimos esta noticia con ilusión, agradeciendo el esfuerzo realizado por el Ministerio y la Ciudad Autónoma para dar, de la mano de la Enfermería, un paso adelante en la protección de la infancia y en la consolidación de la profesión como una fuente de valor para la sociedad en su conjunto, más allá de los límites de la atención directa al paciente”.
Beneficios de la Enfermería Escolar
La presencia de enfermeros en los centros educativos aporta ventajas clave para la comunidad, entre los que destacan la atención sanitaria especializada inmediata ante emergencias, accidentes y enfermedades crónicas; la posibilidad de administración y control de medicación en alumnado con necesidades específicas; la detección temprana de problemas de salud, como alergias, diabetes o trastornos alimentarios; la promoción de hábitos saludables en alimentación, higiene y actividad física; y el asesoramiento y formación al profesorado y familias en primeros auxilios y prevención.
Además, tendrá otra consecuencia positiva de gran relevancia social: servirá para reducir tanto el absentismo escolar del alumnado como el absentismo laboral de aquellos padres que, por causa de las necesidades asistenciales de sus hijos, deben acudir a los centros dejando sus trabajos.
“La utilidad de esta medida está más que contrastada en otros territorios”, afirma Miralles, quien destaca los casos de éxito que ya se han consolidado en otras comunidades, como Madrid y Andalucía, donde la presencia de enfermeros escolares ha permitido un mayor control de enfermedades crónicas y una mejor respuesta ante emergencias sanitarias.
Consolidación
Con la materialización de esta iniciativa, el Colegio Oficial de Enfermería ve de nuevo cómo se alcanza uno de sus principales objetivos, sumándose así la Enfermería Escolar a otros recientes éxitos en el crecimiento de la profesión enfermera, entre los que destaca la prescripción de medicamentos no sujetos a prescripción médica (implementada en abril de 2024); “este es el principio de un camino de éxito, y la Enfermería debe sentirse orgullosa de haber roto una nueva barrera, en este caso la de los centros escolares, que llevará a nuestros profesionales a incrementar su peso en nuestra sociedad”, afirma Miralles.
Desde el Colegio Oficial de Enfermería de Melilla se aplaude este acuerdo como un ejemplo de buena gestión pública, si bien se advierte de la importancia de consolidar la iniciativa en el tiempo, a fin de obtener beneficios reales a lo largo del tiempo.
"Si queremos explotar todo el potencial de la Enfermería Escolar, esta iniciativa debe proyectarse a largo plazo, aunque desde el Colegio Oficial de la Enfermería de Melilla estamos seguros de que, una vez que las familias y los docentes vean las ventajas de su incorporación a los centros, no querrán que las enfermeras salgan de los centros”, ha concluido el presidente del Colegio.