No ha dejado de crecer en la competición desde que diera sus primeros pasos en un Sant Josep de Girona que le llevó a debutar en la Liga LEB Oro de la mano de Zan Tabak y dando descanso al histórico Darryl Midleton pero, desde entonces, nadie le ha regalado nada a un Edu Gatell acostumbrado a luchar por sus sueños.
Así logró defender durante uno de sus primeros encuentros en la Liga a un Edu Hernández-Sonseca al que había idolatrado durante años (leer reportaje) lo que le valió en parte su pasaporte definitivo para poder asentarse en una Liga LEB Oro en la que su nombre suena ya con fuerza cada fin de semana en los scoutings de los entrenadores y equipos rivales.
Todo ello tras cinco temporadas en las que creció en las filas del Magia Huesca y en las que está madurando a pasos agigantados vistiendo la camiseta de un Melilla Baloncesto en el que cumplía, precisamente el pasado viernes, su primer centenario en el club. La ocasión idónea para poder asumir galones en una noche en la que ejerció como titular ante sus ex compañeros oscenses. Otro de los datos a destacar es que este baloncestistas más queridos por toda la afición de nuestra ciudad desde el primer partido ya que es uno de esos jugadores que se dejan todo en cada una de las jugadas de los minutos que disputa indistintamente del rival que tenga enfrente de él.
Y es que, ante la baja de Oliver Arteaga, Gatell multiplicó su potencial sobre la cancha necesitando únicamente de 16 minutos de juego para poder firmar un total de 30 tantos de valoración fundamentales a la hora de desatascar el encuentro. Todo ello gracias a los 15 puntos (1/1 TL y 7/7 TC), ocho rebotes, tres asistencias, tres recuperaciones, tres tapones y una falta recibida con los que decantó la balanza de un encuentro que permitirá a los suyos luchar durante la última jornada del campeonato por la sexta plaza.
Sin lugar a duda, el mejor precedente posible de cara a unos playoffs por el ascenso en los que la experiencia adquirida el pasado curso, unida a su crecimiento, serán dos de los puntos fuertes de un Melilla Baloncesto llamado a luchar por el ascenso.
Protagonista
Eso sí, antes de cumplir con ella, Gatell analizaba lo que había dado de sí un choque con una importante carga emotiva para él: “Era un partido especial por todo lo que supone el Magia Huesca para mí al ser el equipo que me firmó mi primer contrato profesional. Ya durante la semana había recibido mensajes emotivos de la gente que conozco en Huesca pero una vez que saltas a la pista intentas dejar todo eso atrás para poder hacer el mejor partido posible. Al final las cosas salieron de la mejor manera posible, el equipo ganó y yo terminé por hacerme con un MVP que, si bien es cierto, es únicamente mérito de mis compañeros por su confianza en mí”. Y es que ha sido precisamente esa confianza la clave que explica el buen momento de un Gatell que ha sabido aprovechar al máximo todas y cada una de sus oportunidades: “Todo es fruto del trabajo del día a día junto al equipo. Por desgracia Oli Arteaga ha estado tocado y eso le ha obligado a descansar permitiendo que yo tuviera más minutos y que, con la confianza de mis compañeros pudiera ir creciendo con el paso de las semanas. Me estoy sintiendo sumamente cómodo con el equipo y creo que eso se está trasladando al juego”.
De este modo la entidad melillense ha sabido sobreponerse a las adversidades de un curso en el que las lesiones se han cebado con el conjunto de la Ciudad Autónoma: “Ha sido una temporada irregular marcada por muchas bajas. Desde el comienzo de la temporada tuvimos problemas y, lejos de mejorar, esto se acentuó en los momentos claves pero ahora parece que nos encontramos en un buen momento pese a que todavía no hemos podido estar todos juntos durante las últimas jornadas. En unos playoffs todo comienza de cero y todo cambia por completo así que tan solo podemos seguir trabajando”.
Será en esa fase final donde la experiencia adquirida el pasado curso sea fundamental para volver a luchar por un deseado ascenso: “Va a ser uno de los años más duros debido a la igualdad que está teniendo este año la Liga. Aún no sabemos cuál será nuestro rival pero seguro será un equipo duro y exigente ante el que daremos lo mejor de nosotros para poder llegar lo más lejos posible con la motivación y la experiencia de lo que supuso el año pasado”.
Un reto con el que redondear una temporada en la que acaba de cumplir, precisamente, 100 partidos con la entidad melillense tras tres años en la ciudad: “En el baloncesto actual resulta complicado estar tres años en un mismo equipo pero el destino quiso que estos 100 partidos llegaran de una manera bonita ante el que había sido mi último equipo. Cuando te paras a pensar te das cuenta de que se te valora en el día a día y de que se respeta tu trabajo y esa es la mejor motivación para poder seguir trabajando”, concluyó.
La portavoz del Gobierno de la Ciudad Autónoma, Fadela Mohatar, ha mostrado su perplejidad ante…
En la mañana de este domingo 24 de noviembre, el Parque Forestal ha acogido la…
La FMB dio a conocer la composición de las selecciones infantiles y cadetes de la…
Navalcarnero: Óscar López; Aguado, Montoya (Richi Souza, min. 60), Espinosa, Róber; Ortolá (Chechu Cruz, min.…
El Melilla se mantiene una jornada más en la zona de descenso a Tercera Federación, tras empatar…
Melilla Urban Freestyle junto al Club Petanca Stopy Melilla se sumaron durante este fin de…